Un peritaje del Cuerpo Médico Forense (CMF) concluyó que si bien Marcelo Villalba, el detenido por el crimen de Anahí Benítez, puede comprender la criminalidad de sus actos, quizás no pueda dirigir sus acciones. La investigación se realizó a raíz de una causa por abuso sexual simple, pero mediante este resultado podría ser declarado inimputable.
Estas conclusiones del peritaje -que llegaron en las últimas horas al Juzgado de Instrucción 44- indican que “si bien surge capacidad psíquica para comprender el disvalor de su conducta, surge verosímil un desmedro en su capacidad de dirigir su accionar debido a su precaria, impulsiva y bizarra organización de la personalidad”.
De acuerdo con la pericia, Villalba “evidenció sintomatología compatible con un trastorno de la personalidad esquizotípico parcialmente estabilizado y sin tratamiento al momento del examen” y que no era necesaria una internación. Por último, aconsejaron que haga “tratamiento interdisciplinario en salud mental (psiquiátrico, psicológico y de rehabilitación) en forma reglada.