Para un gran número de estadounidenses es muy fuerte el desdén por Donald Trump, según una nueva encuesta que muestra una impopularidad sin precedentes del principal precandidato presidencial republicano mientras intenta superar los recientes reveses de campaña.
Siete de cada 10 personas, entre ellas cerca de la mitad de los votantes republicanos, tienen una opinión desfavorable de Trump, de acuerdo con una nueva encuesta de The Associated Press-GfK, realizada online con encuentadores elegidos al azar.
Es una opinión compartida por las mayorías de hombres y mujeres; jóvenes y viejos; conservadores, moderados y liberales; blancos, hispanos y negros: una amplia y devastadora impopularidad del empresario multimillonario.
Incluso en el sur del país, una región donde Trump ha ganado las primarias republicanas de manera decisiva, cerca de un 70% lo ven desfavorablemente. Y entre los blancos sin educación universitaria, uno de los bloques de votantes más fieles de Trump, el 55% tiene una opinión negativa.
Trump sigue ostentando el liderazgo republicano en número de delegados y ha construido un público fiel que tiene una participación constante del electorado republicano en las primarias. Sin embargo, la amplitud de su impopularidad plantea dudas importantes acerca de cómo podría hilvanar el apoyo suficiente en las elecciones generales para ganar la Casa Blanca.
También pone de relieve los problemas que todavía puede enfrentar en la contienda republicana, que parece dirigirse a una convención impugnada, donde miembros clave del partido tendrían que decidir quién representará al Partido Republicano en la campaña presidencial.
Trump "está en riesgo de que le nieguen la nominación porque los activistas de base del partido temen que haya tanta gente que no le agrade que no podrá ganar en realidad'', dijo Ari Fleischer, exasesor del presidente George W. Bush.
Más allá de la percepción generalmente negativa sobre Trump, la gran mayoría agregó que no lo describirían como una persona civil, compasiva ni simpática. En casi todas estas medidas, a Trumple fue peor que a los demás contendientes demócratas o republicanos.
Eso no significa que los votantes tengan mucho cariño por los rivales de Trump, pero sus percepciones negativas no se comparan con la profundidad de la aversión hacia Trump.
El senador por Texas Ted Cruz, que trata de alcanzar a Trump en conteo de delegados republicanos, fue visto de manera desfavorable por un 59% de los encuestados, mientras que el 55% tuvo una opinión negativa de la principal precandidata demócrata, Hillary Clinton.
Según la misma encuesta, Trump podría estar siendo más un peso que una ayuda al Partido Republicano, pues ahora una gran mayoría de los estadounidenses ven ahora desfavorablemente a esa organización política.
Según el sondeo, dos de cada tres personas tienen ahora una opinión desfavorable del Partido Republicano. La calificación negativa fue otorgada por el 67% de los encuestados, un porcentaje que supera el 58% que veían así a esa organización en octubre de 2014. Sólo el 30% de los estadounidenses tiene una opinión favorable del Partido Republicano, según el sondeo.
El cambio de opiniones ha ocurrido luego de que Trump pasó de empresario y astro de televisión a ser el favorito del Partido Republicano para la candidatura presidencial. Eso contrasta con la opinión pública hacia el Partido Demócrata, sobre el que los estadounidenses están divididos de manera más uniforme.
La nueva encuesta mostró que el 48% de los encuestados tiene una opinión favorable del Partido Demócrata, mientras que el 50% tiene una opinión desfavorable. Esos porcentajes se han mantenido mayormente sin cambios desde octubre de 2014.
Muchos republicanos temen que las declaraciones que ha hecho Trump acerca de las mujeres y las minorías podrían causar un daño duradero a su partido.