La escuela primaria 1-738 Ana María Castillo está en San Martín y tiene una matrícula que ronda los 170 alumnos; el problema es que esos chicos no toman clases en aulas sino que lo hacen en las habitaciones de dos casas del barrio Mebna, donde la escuela nació en 2009 y funciona desde entonces.
"La verdad es que venimos reclamando desde hace años; en todo este tiempo hemos hablado con ministros, con delegados, con el intendente de San Martín; también hemos hecho notas y hasta juntamos firmas de mucha gente que nos apoya, pero no tenemos respuesta y nuestros hijos siguen hacinados sin llegar a la escuela propia", cuenta Eugenio, uno de los papás que se reunió frente a las dos casas de barrio donde funciona la escuela.
Eugenio tiene a tres hijos tomando clases allí, de donde este año sale la primera promoción de egresados sin que la comunidad escolar haya conseguido la construcción del establecimiento. "Cuando esto arrancó era solo para los jardines, pero fueron pasando los años y se abrieron nuevas secciones sin que llegara una respuesta", explican los papás desde la vereda, donde se juntaron a reclamar ya que las autoridades de la escuela no autorizaron realizar una reunión en el patio.
Hoy, la escuela Ana María Castillo tiene alumnos de todas las edades, desde la sala de 4 años has el 7° grado, repartidos en ocho habitaciones que hacen las veces de aula.
"Mi nene está en sala de cuatro donde hay 16 niños en una habitación de tres por tres", dice una de las mamás y cuenta que en tan poco espacio, la docente a cargo ni siquiera tiene cómo moverse entre los bancos.
Los 170 alumnos, además de los docentes y celadores comparten cuatro baños, "que son baños de una casa de barrio, no sanitarios de escuela", dice un papá y agrega que a los recreos salen por turno, ya que no hay espacio para todos: "Hay un garaje donde los chicos hacen gimnasia, aunque para que tener espacio el maestro abre el portón y se para en la vereda".
Además del hacinamiento los alumnos sufren el calor y el frío, ya que según los papás, los propietarios de ambas casas no han autorizado modificaciones para instalar aires o calefactores. "Ya no sabemos cómo pedir que se destrabe el expediente y se construya la escuela", agregan los papás, que explican que a pocos metros está el terreno para la construcción y que frente a la falta de respuestas, hasta han pensado en cortar el carril Costa Canal Montecaseros, que es la vía de ingreso a la ciudad de San Martín que corre frente al barrio Mebna.
Julio Barrera, delegado de la Dirección General de Escuelas admite que el reclamo de los padres "es justo" y confirma que "la falta de espacios es real, el gobierno escolar está al tanto de todo y existe predisposición para dar una respuesta".
Según Barrera, la licitación para el edificio se hizo en noviembre, con un presupuesto de obra de 16 millones de pesos, aunque la empresa que se presentó realizó una oferta superior:
"Esta licitación se hace con fondos de la nación y entonces ahora hay que gestionar en Buenos Aires una ampliación del presupuesto de la obra", dijo el funcionario, aunque no precisó cuándo podría destrabarse .
En realidad, a mediados de 2014 la Subsecretaría de Infraestructura Educativa anunció, a través del plan nacional Más Escuelas, la construcción para este año de tres escuelas en San Martín: así, además de la 1-738 Ana María Castillo, el gobierno prometió edificio para las escuelas 4-209 Blanca Nélida Gutiérrez y para la 1-739 del barrio Nueva Argentina. En ningún caso las obras han comenzado.
