Era el año 2010, y en la cancha de fútbol de la Liga Mercedina (de Mercedes, Buenos Aires) tuvo lugar un encuentro antológico. Pero no: no había fútbol, lectores, sino fanáticos de literaturas y de canciones.
"Lo invitamos a tocar en la fiesta del debut de la Revista Orsai (que se realizó en ese estadio) y vino sin preguntar para qué y sin cobrar cachet", recuerda el multifacético Hernán Casciari sobre la primera vez que vio en persona a Zambayonny. "Vino como si fuera un amigo de toda la vida. Él es para mí un amigo de toda la vida al que conocí muy tarde", define.
Por su parte, Zambayonny (o Diego Perdomo, o simplemente Zamba) destaca que ambos ya se conocían virtualmente, porque se leían y sabían cada uno de la existencia del otro. "Le dije que sí y lo conocí, y así fue también mi primer estado", confiesa.
Hernán es inclasificable: periodista, bloggero, un "científico loco" que experimenta con la escritura, el periodismo, la actuación y el humor, que creó la revista Orsai y saltó a la fama con el blog-libro-espectáculo "Más respeto, que soy tu madre".
Pero Zambayonny también es otro sui generis: cancionista, exponente del llamado "romance guarango" o "amor escatológico" (define sarcásticamente en su biografía de Wikipedia), donde se cantan situaciones cotidianas desde una poesía llena de humor negro y palabras (de las buenas y de las "malas").
Que se miraran con simpatía era solo cuestión de tiempo. Porque sí: ahora el fútbol vuelve a ser el contexto para juntarse, porque andan presentando por el país “Tragedias mundialistas. Historias de fútbol, de amor y de muerte súbita” (hoy, en el Teatro Selectro), donde combinan relatos y canciones.
¿Pero a qué viene el título de "tragedias" y a qué el de "mundialistas"? Responde Casciari: "'Tragedias' es un espectáculo que hacemos con Zamba cada vez que podemos y nos dan las agendas. En junio y julio decidimos que solamente vamos a tener la cabeza en el fútbol, así que todas las funciones de 'Tragedias' que hacemos en estos meses tienen una temática que no es exclusivamente futbolera: todo va a estar teñido por el juego, por el azar, por las tragedias deportivas, por la competencia desleal... todas las canciones de él y los cuentos míos son trágicos, pero no son lo mismo que hacemos en otras puestas".
-Y el espectáculo original surge de una anécdota muy curiosa con la corbata de un fan muerto, tengo entendido...
-Z: Sí, "Tragedias" surgió de la sobremesa de una cena, en la que estábamos comiendo un asado, nos quedamos conversando un rato largo y salió el tema de que la familia de un fan que había fallecido me había regalado una corbata. Él me contó la historia de un fan que había muerto y la familia le había escrito una carta a él... Pero siguió con que yo le conté que habíamos tenido que sacrificar al perro de la familia y yo había escrito una canción muy triste. Todas historias así...
Entonces me preguntó si yo tenía un traje, le dije que sí y me propuso que hiciéramos este espectáculo, contando cuentos y canciones trágicas.
-Hay algunas críticas que dicen que "Tragedias" es un show donde prima el dolor, ¿cómo son esas dosis en esta versión "mundialistas"?
-HC: El otro día hablábamos de que lo que hacemos es como en los velorios a las 3 de la mañana, cuando la gente ya está harta de estar triste y se pone a contar chistes negros. Es más o menos eso: no es stand up para cagarse de risa, pero en el dolor hay momentos divertidos, y no creo que el espectador cuando salga del teatro se quiera suicidar, pero va a reflexionar sobre la vida de una manera distinta de si hubiera ido a ver stand up.
- Z: Y este show mundialista quizás tiene un poco más de risa, pero también hay una cosa triste...
-¿Y es más difícil hacer reír o hacer llorar?
-Z: Es difícil hacer reír y es difícil hacer llorar. Yo, al menos en mi caso, no las busco puntualmente: uno cuando encuentra una idea la desarrolla y se va dando cuenta para qué lado va. No es que tenés un plan previo. Uno la desarrolla y después ve de qué manera queda mejor la idea.
Y, como ningún dúo puede formarse sin una cuota de admiración mutua y convivencia, la pregunta es obligada:
- ¿Qué admira y qué no-admira cada uno del otro?
-HC: Lo que más me acerca a Diego es que no es un tipo que te exija demasiado en la amistad. Eso es ma-ra-vi-llo-so. No está todo el tiempo pidiendo que lo llame, o que hagamos cosas o vayamos a comer. Yo tampoco soy de involucrarme tan intensamente con la gente, tengo esa maravilla: es como de "bajo mantenimiento", lo encuentro parecido a mí. Probablemente sea porque somos de ciudades alejadas a Buenos Aires (N. del R.: Zambayonny es de Bahía Blanca).
¿Y qué cosa no admiro de él? No sé, tampoco lo conozco tanto como para saber cuáles son sus pequeños detalles. Yo creo que si alguna vez nos tocara alquilar un departamento y convivir 15 días tendría mucho para decir (ríe).
-Z: De Hernán admiro todo. Me parece un tipo súper talentoso. Como decía, yo era lector y fanático de él mucho antes de conocerlo. Para mí es un maestro en la forma en que desarrolla las ideas. Además tiene mucho empuje para poder promocionar lo suyo, defenderlo, cuidarlo y ser independiente. Son cosas que yo admiro mucho. Y es un placer conversar con él porque siempre tiene algo para aportar: es lindo conversar con alguien que siempre tiene alguna idea. Además nunca dice que no. Y yo soy exactamente igual.
En cuanto a qué cosa no admiro... y bueno, él es de Racing, y me gustaría que fuera de Olimpo de Bahía Blanca (risas). Pero bueno, por lo menos compartimos el sentimiento por la Selección Nacional.
La Ficha
Con Hernán Casciari (textos) y Zambayonny (música).
Fecha y hora: Hoy, a las 21.
Lugar: Teatro Selectro (Capitán de Fragata Moyano, 111).
Entradas: $400, $450. Disponibles solamente de forma online en www.eventbrite.com.ar.