Desde la mesa chica del kirhnerismo negaron hoy que exista un "co-gobierno" entre varios funcionarios ante la licencia de la presidenta Cristina Fernández por su operación, y subrayó que ella es "la única que tiene el poder", pese a haber delegado las funciones en el vicepresidente Amado Boudou.
El jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, rechazó las conjeturas que se realizaron por la internación de la primera mandataria, que indicaban que las decisiones del Gobierno habían recaído en el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini, y él mismo, entre otros funcionarios de la denominada "mesa chica".
"Nosotros somos simplemente asesores de ella en distintas temáticas y formamos en conjunto un equipo de trabajo, que en este caso encabeza el vicepresidente", aclaró Abal Medina.
El jefe de ministros consideró que los trascendidos sobre la toma de decisiones en el Gobierno son "especulaciones" y remarcó que "la única que tiene el poder es la Presidenta", quien se encuentra internada en la Fundación Favaloro tras someterse a una operación por un hematoma en la cabeza.
Uno de los dirigentes de la oposición que realizó esos planteos sobre las definiciones del Ejecutivo fue el jefe del bloque de diputados del PRO, Federico Pinedo, quien sostuvo que el actual "presidente" es Zannini, aunque estimó que "no va a pasar absolutamente nada" hasta que la mandataria vuelva a ejercer el poder.
Por su parte, la diputada kirchnerista Diana Conti afirmó: "No tengan dudas de que las decisiones políticas trascendentales las sigue tomando ella (por la mandataria) y el vicepresidente acata".
Conti fue requerida luego acerca del primogénito de la mandataria Máximo Kirchner, fundador de La Cámpora, a quien distintos sectores señalan como integrante de la "mesa chica" donde se adoptan las más altas decisiones del poder.
"Máximo, muy compenetrado con los asuntos que manejaba su padre (Néstor Kirchner) y los que maneja su madre; seguramente es el nexo de transmisión (de las órdenes de la Presidenta) porque es el hijo, probablemente está más en la habitación con ella que alguien que no es familiar; y, además, Máximo siempre opinó y con sentido muy común, muy ubicado siempre", puntualizó.
En tanto, el filósofo y candidato a diputado por el oficialismo, Ricardo Forster, volvió a apoyar a Boudou y atribuyó las críticas contra el vicepresidente a sectores que buscan "debilitar la vida republicana para tratar de pescar algo en un río revuelto".
En el marco de las críticas al vicepresidente, el gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota, consideró que "es lamentable" que el Boudou "esté a cargo del gobierno" nacional, por el "desprestigio" que tiene, al tiempo que ironizó con que Alvaro Alsogaray "debe estar contento que sea presidente".
En línea, el diputado peronista Felipe Solá volvió a cuestionar a Boudou, a quien llamó "niño" e "inmaduro" y resaltó que "no se supo defender" ante las acusaciones que lo involucraron en el caso Ciccone.