La diputada nacional y precandidata presidencial de la Coalición Cívica Elisa Carrió volvió hoy a defender al juez de la Corte Suprema Carlos Fayt, al decir que el Gobierno lo trata de "senil" cuando ella ha "visto a un jefe de Gabinete duro por la cocaína".
"Este es un trato inhumano y cruel; decir senil, decir que está inhabilitado (Fayt) cuando están tantos delincuentes en el poder y, además, tantas personas drogadas en el poder. Yo he visto a un jefe de Gabinete duro por la cocaína", enfatizó Carrió en diálogo con radio Mitre.
La precandidata presidencial, al volver a rechazar los ataques del oficialismo contra el magistrado -de 97 años-, alertó que los representantes de la agrupación kirchnerista La Cámpora en el Congreso de la Nación "se están convirtiendo en violentos".
"Me da la impresión de que este cambio en la Comisión de Juicio Político es un cambio ordenado por la presidenta (Cristina Fernández) y ejecutado por chiquillos que se están convirtiendo en delincuentes morales", acusó.
Y amplió: "La peor violencia es la violencia verbal, dirigidos por (el jefe de Gabinete) Aníbal Fernández, además contra una persona de la tercera edad".
Reiteró que "es un acto de tortura porque la tortura puede ser física o puede ser moral, y hay una tortura moral porque pretenden declarar la inhabilidad moral sobreviniente, como un estado de senilidad o de locura" y se preguntó: "¿Por qué no hacen eso con otros funcionarios?".
"Porque está la búsqueda ya desesperada de impunidad para la presidenta y para su familia, y para personas cercanas a ella. Una Corte adicta, camporista o seudocamporista, podría garantizar la impunidad final de procesos iniciados contra la presidenta", concluyó Carrió.