El mediocampista de River Plate Carlos Sánchez hizo hoy acopio de la sucesión de superclásicos que hubo desde el año pasado para afirmar que "Boca es un equipo duro pero no temible".
Consideró que en la trilogía de enfrentamientos que habrá en solo doce días, "ninguno va a renegar de la filosofía que viene mostrando" y por ende descartó que haya "algún cambio" en la forma de juego de ambos equipos.
"Nosotros tenemos que respetar lo que venimos haciendo y tratar de estar atentos porque ellos tienen jugadores muy buenos", sostuvo el uruguayo y sintetizó: "Boca es un equipo duro, pero no temible".
Sánchez, uno de los jugadores de mejor rendimiento en el iluminado comienzo de Marcelo Gallardo como técnico riverplatense el año pasado, admitió que en estos días el equino "no viene bien futbolísticamente" pero que ante Boca habrá que sacar "la mejor jerarquía".
Sánchez volvió a reflejar el bajo perfil cada vez que le tocó hablar en la conferencia de prensa que compartió con su compañero Jonatan Maidana en el predio de Ezeiza tras la primera práctica semanal.
Bajó el tono a las grandilocuencias, dijo no tener ninguna "cuenta pendiente" por haber hecho varios goles pero no a Boca, o que la "ansiedad juega en contra" y que hay que preparar el partido "con tranquilidad".
Asimismo, aseguró que los futbolistas no van a especular con guardar reservas para el partido siguiente, ya por la Copa.
"Nunca se puede regular la máquina, siempre tratás de jugar al cien por ciento y das todo", dijo, sin detenerse en lo que viene después.
En cuanto al ida y vuelta de Libertadores, que se iniciará el jueves 7 de mayo, consideró que "la ventaja hay que hacerla de local", como lo será River ese día.