Ganador del Rally Dakar en 2010 vuelve “motivado y dispuesto a hacer lo mejor posible” en la competencia que arranca en Lima el próximo 5 de enero.
El piloto español Carlos Sainz (Qatar Red Bull), aseguró que acudirá al Rally Dakar que comienza el 5 de enero en Lima “motivado y dispuesto a hacerlo lo mejor posible con los medios disponibles” con su nuevo buggy, pese a que estrena experiencia con un coche de características diferentes a las habituales.
El vencedor del Dakar 2010 acudirá a la cita con la ambición que lo llevó a ganar además dos Mundiales de Rallys tras un año de parate.
El madrileño acepta el reto. “Cuando me retiré del Mundial de rallies lo hice por una decisión personal y hace dos años fui al Dakar por una estrategia de marca. El año pasado dejé de colaborar con Volkswagen y ahora surgió con Qatar Red Bull y he decidido volver porque los retos también se pueden afrontar a los 50 años”, explicó.
Las diferencias entre el coche de años anteriores y el buggy que conducirá en el Dakar son importantes, explicó Sainz. “Pasamos de cuatro ruedas motrices a dos. En el recorrido de suspensión hay una diferencia brutal. El nuevo coche es mucho más ligero”, dijo.
En cuanto a la estrategia, Sainz también tiene claro que con el buggy tendrá dificultades a la hora de transitar por los caminos, ya que es un coche preparado para superficies más abiertas.
Respecto de los rivales, Carlos Sainz señaló al equipo Mini del francés Stéphane Peterhansel y el español Nani Roma, pero su “favorito absoluto” es el sudafricano Giniel de Villiers.
