El emblemático puente 'Cruzado', que vincula la villa cabecera con Eugenio Bustos y los distritos del sur departamental, deberá cambiar el mote con el que lo conocen todos en San Carlos. Sucede que en semanas será inaugurada una obra -la cual fue objeto de reclamos vecinales por más de 30 años- que, además de ensanchar y refuncionalizar este transitado puente, también se ocupó de 'enderezar' su carril.
El nombre le viene desde su génesis, pues fue confeccionado sobre el arroyo Yaucha de manera oblicua respecto a la calle que lo contiene, la Bernardo Quiroga. Con el tiempo, esta arteria se volvió central para el tránsito del departamento valletano, convirtiéndose en bulevar a ambos extremos del puente.
Así fue que el 'Cruzado' quedó demasiado angosto e incómodo para la normal afluencia vehicular que hoy recibe. El sitio fue noticia en varias oportunidades, porque no pasaba mucho tiempo en que algún accidente ocurría en la zona para agravar el malestar y el estado de alarma de los vecinos que residen en las cercanías.
"Era un peligro. Los conductores venían a alta velocidad por el bulevar y al llegar al puente debían frenar a cero y esperar porque se reducía una vía. Muchos no lo hacían y allí las consecuencias. Además, había un sauce sobre el arroyo que obstaculizaba el tránsito", comentó Sandra Cuevas, quien tiene su domicilio a metros del lugar donde ayer trabajaban los obreros.
Hace cuatro meses que comenzaron las tareas en el lugar y desde el municipio tienen intenciones de inaugurar la ansiada remodelación para la Fiesta de la Tradición, que coincide con el aniversario departamental, los primeros días de noviembre. Por ahora, el tránsito permanece cortado en una de las vías.
Se trata de dos proyectos en uno. Por un lado, se restauró el puente viejo sobre el arroyo Yaucha y se construyó uno nuevo de seis metros de ancho, con dos veredas a sus costados y una ciclovía que pasa por el medio. Esta obra tiene un costo de 1,6 millones de pesos. Fue licitada con fondos provinciales y adjudicada a la firma Brizuela y Villafañe SRL.
La otra etapa está conformada por las obras complementarias al puente: el ensanche de la arteria con pavimento unos metros previos al ingreso, las defensas de hormigón (del tipo New Jersey) para proteger a los peatones y la gente que circule por la ciclovía, los guardarrails, la iluminación y las dársenas de ingresos a barrios de la zona. Este proyecto requirió una inversión cercana a los 1,5 millón de pesos y fue asumida por el municipio.
"Yo paso todos los días y muchas noches por aquí para ir a ver a mi hija y se había vuelto muy peligroso. Han ocurrido accidentes muy graves", señaló Marta Ferreyra. La mujer dijo estar entusiasmada con la obra, pero también refirió al mantenimiento de las mismas. "Esta bicisenda la hicieron hace poco y ya está rota", apuntó.
Walter Galli, secretario de Obras, Servicios Públicos y Vivienda de San Carlos, reconoció que dar solución a este nudo vial era una cuestión urgente. "La calle Bernardo Quiroga pasó a ser central, en los últimos años, para la dinámica vehicular del departamento", expresó el funcionario.
Sucede que es la arteria- bulevar en gran parte de su trayecto- que utilizan quienes viven en Eugenio Bustos o los distritos sureños para acceder a la villa cabecera, donde funciona la Municipalidad y otras instituciones claves. Pero también, es el trayecto utilizado desde el centro de San Carlos hasta Eugenio Bustos, donde funcionan dos supermercados, el hospital Tagarelli y el banco.
"Como el tránsito creció mucho, colocamos por seguridad los semáforos en la intersección de la Quiroga con la ruta 40, donde se producía una gran congestión vehicular y peligro para los peatones. Después construimos la ciclovía, pero el puente era una necesidad latente", señaló Galli.