Caravana infinita de Huracán Las Heras

Las Heras fue una fiesta. Todo el departamento salió a las calles para recibir al plantel de Huracán, que se trajo desde Salta el ascenso al Federal A. Miles de hinchas coparon el coloso del Globo.

Caravana infinita de Huracán Las Heras

“Mañana no trabaja nadie, Las Heras está de fiesta por varios días” decía Walter, uno de los miles de hinchas de Huracán que salió a las calles para recibir a los héroes de Salta.

Es que hacía mucho que el departamento no tenía una alegría de este tamaño. Hay que retrotraerse en el tiempo hasta 1996 cuando Pablo Chacón ganaba la medalla de bronce en boxeo en los Juegos Olímpicos de Atlanta. O al 2011 cuando el equipo comandado por Luis Sperdutti lograba el ascenso al Federal B.

En esas dos ocasiones la gente dijo presente como ayer.

“Nos movemos a paso de hombre por la cantidad de gente que hay”, decían los jugadores cuando atendían sus celulares y era cierto, ya que cientos de hinchas los fueron a buscar hasta el límite provincial e hicieron tiempo para esperar a sus ídolos. “Nos fuimos al supermercado, compramos unas costillas y las hicimos al costado de la ruta mientras esperábamos”, contó Daniel cuando llegaban al General San Martín.

Motos, autos, camionetas, camiones, bicicletas, cualquier transporte servía para llegar hasta la cancha y estar cerca de los jugadores.

“Gracias Ratón por todo lo que hiciste por el club, te pido que aguantes, nosotros te vamos a apoyar”, le decía muy emocionado Darío mientras le agarraba la cara al presidente del Globo.

Una vez adentro del coloso del Globo, un locutor se encargó de presentar a cada uno de los futbolistas, quienes festejaron entre medio de bengalas y papeles picados.

Miles de selfies con Daniel Giménez y Gonzalo Torres, quien festejó con su mujer y su hija. “Regalame la camiseta”, le dijo un nene al Tanque quien le respondió “Es para mi hijo Benja”.

Los más chiquitos buscaban al que más goles les hizo gritar, Cristian Lucero, y le pedían que le firmaran una camiseta, una bandera o lo que se pudiera autografiar. El héroe de los penales, Franco Agüero, también fue uno de los más buscados y el arquero se encargó de satisfacer a todos. Así fue la tarde en Las Heras, donde todo fue festejo, donde todo fue desahogo y donde esta caravana que arrancó en Salta tendrá una festejo infinito.

La República de Las Heras, dijo presente.

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