Un contador que había sido condenado a 40 años de prisión por haber violado a nueve mujeres en el lapso de tres meses del 2005 y que estaba prófugo desde el 2013 cuando escapó durante una visita a su madre enferma, fue detenido en las últimas horas en Bolivia, informaron hoy fuentes policiales.
Se trata de Alberto Walter Brauton Steimbach (46), quien era considerado un prófugo de "alta peligrosidad" por sus antecedentes.
Fuentes policiales informaron que personal de la Policía Federal Argentina (PFA) y de Interpol lo detuvo en la capital boliviana y ahora comenzarán los trámites de extradición.
El hombre había sido juzgado por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 2 de Morón en 2009 y los jueces lo condenaron a 40 años de cárcel.
Los delitos que comprobaron durante el debate fueron "abuso sexual con acceso carnal agravado por el uso de arma -6 hechos-, abuso sexual con acceso carnal - un hecho-, abuso sexual agravado por el uso de arma en grado de tentativa - un hecho-, abuso sexual con acceso carnal agravado por el uso de arma en grado de tentativa - un hecho-, y rapto -9 hechos-, todos en concurso real entre sí", cometidos en 2005.
Según estableció el TOC 2, las violaciones fueron cometidas entre enero y marzo de 2005 en Loma Hermosa, Merlo, San Alberto, Castelar, Moreno e Ituzaingó, en la zona oeste del conurbano, cuando las víctimas tenían entre 17 y 23 años.
En tanto, Brauton Steimbach se había escapado el 17 de agosto de 2013 mientras cumplía una visita extraordinaria en un domicilio de la calle Varela 921 de la localidad bonaerense de Mariano Acosta, partido de Merlo.
Es que el contador había recibido el beneficio de visitar una vez por mes a su madre que estaba enferma.
En esa oportunidad, el condenado fue acompañado a la vivienda desde la Unidad Penal 39 de Ituzaingó donde cumplía la pena por un efectivo del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), quien supuestamente se había dormido luego que le convidaron una empanada con un somnífero.
Sin embargo, personal de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 5 del Departamento Judicial Morón comprobó que no fue así y acusó al uniformado de haber facilitado la fuga.
Tras la huida, el Ministerio de Seguridad bonaerense había ofrecido hasta 300.000 pesos de recompensa para los que aportaran datos sobre su paradero.
Desde ese momento, Brauton Steimbach permaneció prófugo hasta hoy que estaba custodiado por la Policía boliviana hasta tanto se resuelva la extradición a nuestro país.