El
jefe de Gabinete, Jorge Capitanich
, consideró hoy que el país se encuentra "en la última etapa de un proceso de regularización" de la deuda pública, para alcanzar una normalización del "estado de cumplimiento", que incluye las negociaciones con el
Club de París
.
En su habitual conferencia de prensa en la Casa Rosada, el funcionario se excusó de adelantar "la posición del Gobierno" para la reunión con el Club de París del 28 de mayo próximo, porque "todo proceso de negociación debe ser reservado entre las partes con el objeto de promover la búsqueda de entendimiento".
"Adelantar una posición de cada parte o eventualmente el rol de un organismo determinado, no incumbe a un proceso de negociación complejo de estas características", observó el funcionario.
Sobre el tema, agregó que "este gobierno, tanto el de
Néstor Kirchner como el de Cristina Fernández
se tuvieron que hacer cargo de pagar obligaciones contraídas por otros gobiernos" y sostuvo que ambos presidentes ôdefendieron los intereses de la Nación con una drástica reducción de la deuda pública“.
El funcionario aseguró que están en la última etapa de un proceso de reestructuración para lograr que toda la deuda pública tenga regular estado de cumplimiento, y "en ese contexto se está negociando con el Club de Paris“.
"La posición del gobierno es que tiene una convocatoria a un inicio de negociaciones formal con
el Club de Paris
a partir del 28 de mayo y en consecuencia todo proceso de negociación debe ser reservado entre las partes, con el objeto de promover la búsqueda de entendimiento“, advirtió.
El ministro detalló: "cuando existe un acuerdo de esta naturaleza, debe identificarse el monto efectivo de la deuda, lo cual implica capital e intereses, y a partir de ahí el valor real actualizado de la deuda; luego, cuál es la modalidad y los planes de pago, cuál es el plazo, y sobre todo cuál es el pago de carácter inicial, y los mecanismos de monitoreo para el cumplimiento de esa obligación“.
Según trascendió, el Club de París habría rechazado la propuesta argentina de pago inicial de 250 millones de dólares, para destrabar eventuales créditos, y habría planteado como contraoferta la cifra de 1000 millones dólares, lo que seguramente será analizado en la reunión del 28 de mayo.