Los días de tranquilidad para los habitantes de las torres de San Juan y República de Siria se postergan. Hace 2 años sufrieron casi 2 meses sin gas por graves falencias en las cañerías y cámaras reductoras del fluido y ahora tienen pendiente un emplazamiento municipal de arreglo en diferentes sectores, "por la existencia de problemas edilicios, eléctricos y sanitarios, que afectan la seguridad pública".
La cita corresponde al expediente municipal N° 9480, de la Secretaria de Infraestructura, cuya titular es la ingeniera Laura Profili. La Municipalidad tuvo que intervenir y ejercer el poder de policía sobre estas tradicionales construcciones de los '70 a raíz de un emplazamiento de la doctora Graciela Simón, titular del Tribunal de Gestión Judicial Asociada N° 1, que a su vez había recibido una denuncia por daño temido, radicada en su juzgado por Aldo Porcario y Rodolfo Luna, quienes sostienen ser los administradores de la torres y las cocheras.
Pero esta representación no es reconocida por muchas de las personas que habitan las torres y tampoco por algunos de los administradores de los edificios, como por ejemplo Joaquín Passolas (33), quien atiende los asuntos de bloque B1.
"Yo y ninguno de los moradores de mis pisos reconoce el mandato de estos señores", dijo enfático el joven.
Como se ve, éste es otro de los inconvenientes en el gran consorcio, aspecto que inclusive fue reconocido por la doctora Simón, quien dijo a Los Andes que ella no eligió a las personas, pero que actuó en defensa de la protección de derechos de las personas que moran allí.
Con prescindencia de este aspecto, los problemas técnicos existen y la Secretaría de Infraestructura de la comuna los ha concentrado en 9 apartados.
El listado incluye: reparar pisos en patios de acceso; adecuar el inmueble a la ley de protección de edificios, con un proyecto de prevenciones de incendios aprobado por Bomberos; realizar en presencia de personal de Obras Privadas una prueba hidráulica en las cañerías para verificar pérdidas.
También se solicita "dejar en condiciones el pozo y la bomba de achique en el segundo subsuelo y mantener la limpieza de los desagües pluviales; ajustar el funcionamiento de los ascensores a las normativas vigentes. El requerimiento alcanza a "dejar en condiciones de seguridad las instalaciones eléctricas que correspondan a los espacios comunes y cocheras".
La ingeniera Profili dijo que "solamente se ha reparado el caño de cloacas ubicado entre las torres A1 y B1. Lo demás está incumplido".
Qué puede pasar si persiste la ausencia de trabajos, se le preguntó a la funcionaria. "Un primer paso puede ser la aplicación de multas a los propietarios, porque es un lugar privado, y cada dueño debe encarar o colaborar a solventar las reparaciones. De mantenerse los incumplimientos, podría llegarse a la clausura de los inmuebles, pero por supuesto no queremos arribar a ese extremo y por eso insistiremos en los controles", sostuvo la funcionaria.
Los habitantes del sitio no pueden ignorar el planteo municipal, ya que se realizaron 1.600 notificaciones (en los edificios y en los domicilios particulares de los dueños).
Lo que si se ha concretado ahora es la clausura del espacio de 6 cocheras (sobre un total de 207) porque hay losetas fisuradas.
Silvia, habitante de 30 años, sostuvo que "está gente nos ha invadido (refiriéndose a Porcario y Luna) y la jueza tendría que haberse informado sobre la designación".
Passolas describió que en su torre (B1) se han efectuado diversas tareas y propone como salida que cada edificio "arregle lo que tenga que arreglar".
El abogado Gustavo Lafargue, otro residente, resumió su posición: "Las reparaciones deben efectuarse y de manera urgente para el bien de todas las familias que habitamos allí".
Otro vecino opinó que debería imperar “una unión general y proceder solidariamente a encarar las mejoras como se hizo con la obra de gas de 2012".
Estudio de seguridad del complejo
Los administradores Rodolfo Luna y Aldo Porcario, consultados por Los Andes, manifestaron que su representación está asentada en el expediente judicial.
Añadieron que han solicitado un estudio a la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) para que dictamine si existe peligro estructura que pudiera afectar la seguridad del complejo", y se quejaron de que "no se permitió ingresar al pozo del B1 a los ingenieros comprometidos en la investigación, no obstante que la Municipalidad comprobó allí la existencia de líquidos cloacales".
Afirmaron que les encantaría que los vecinos contribuyeran al pago de las obras comunes, y lamentaron que "los comercios internos, 49 en total, no cancelen las expensas".
Finalmente mostraron fotos de fisuras linderas en el pozo de servicio de la Torre B1.
Para solventar un apuntalamiento de un sector comprometido (en el patio central) es que están solicitando 3 cuotas mensuales con vencimiento los días 10 de octubre, noviembre y diciembre.
Las oficinas que fijaron para abonar los vencimientos que plantea se ubican en Catamarca 83, 2do piso.
Las claves
Los primeros departamentos de las torres de San Juan y Siria se entregaron en noviembre de 1977.
Cantidad de edificios: 6.
Características: 3 torres de 10 pisos y otras 3 de 11 pisos.
Otros inmuebles: 400 locales, entre comercios, bauleras y cocheras.
Habitantes: 2.500 a 3.000 personas.
Constructora: empresa Danilo de Pellegrini.
