Los principales productores de alcohol del mundo ya no pueden ignorar el fenómeno alrededor de la marihuana, con consumidores jóvenes cada vez más tendientes a cambiar la cerveza y los tragos por bebidas que contengan cannabis.
Algunos han aprovechado el momento sin titubear. Constellation Brands, fabricante de cerveza Corona y vodka Svedka, invirtió 4.000 millones de dólares en la empresa canadiense de marihuana Canopy Growth.
El mercado que se abre es "potencialmente una de las oportunidades de crecimiento global más importantes de la próxima década", dijo el presidente ejecutivo de Constellation, Robert Sands.
Las ventas de marihuana legal y productos relacionados deberían alcanzar los 200.000 millones de dólares en 15 años y el mercado se está abriendo "mucho más rápido de lo que se pensaba", agregó.
Siguiendo los pasos de Uruguay, Canadá se convertirá el miércoles en el segundo país del mundo en legalizar la marihuana recreativa.
El cannabis aún está prohibido por la ley federal de Estados Unidos para cualquier motivo, pero nueve estados han legalizado su uso recreativo bajo sus propias leyes, mientras que otros han suavizado su prohibición en los últimos años.
Como resultado, están proliferando nuevos métodos de consumo: comestibles en forma de dulces, productos horneados y helados, así como vaporizadores y ungüentos.
Y están las bebidas.
Diageo, el mayor productor de licores del mundo, que incluye el vodka Smirnoff y el whisky Johnny Walker, está en conversaciones con productores canadienses, según Bloomberg.
El productor de cerveza Molson Coors también anunció un emprendimiento conjunto con The Hydropothecary Corporation de Canadá.
Otros son más reacios.
Alexandre Ricard, CEO de Pernod Ricard, explicó a fines de agosto que su compañía estaba vigilando el mercado, especialmente para determinar la probabilidad de un giro hacia el cannabis en el consumo de licores de alta gama.
Y por ahora, las señales son mixtas.
Investigadores de la Universidad de Connecticut y la Universidad Estatal de Georgia descubrieron el año pasado que las ventas de alcohol bajaron 12,4% en los condados estadounidenses en los que se legalizó la marihuana medicinal.
Pero otros, incluido el Distilled Spirits Council, un organismo de la industria que representa a los fabricantes de licores en Estados Unidos, dicen que las ventas no se han visto afectadas.
"Todavía es demasiado pronto para decir si afectó de una manera u otra", dijo Keith Villa, un maestro cervecero de Colorado.
Creador de la popular cerveza de trigo "Blue Moon", Villa planea comercializar una cerveza sin alcohol que contenga THC, el ingrediente psicoactivo de la marihuana.
"Como pasa con una cerveza normal, provoca un mareo similar al del alcohol", señaló.
"Pero a la mañana siguiente no deberías tener una resaca".
Si bien es posible mezclar alcohol y cannabis, él no quiere tomar ese camino. Hacerlo es ilegal y ambas sustancias pueden agravar los efectos de la otra, explicó.
Las cervezas de cáñamo y las que contienen cannabidiol, un componente de cannabis que no es psicoactivo, ya están disponibles. También hay bebidas con THC añadido.
A mediados de año en California, la cervecera Lagunitas, propiedad de la holandesa Heineken, comenzó a comercializar Hi-Fi Hops, una mezcla sin alcohol que hace que los bebedores se sientan drogados.
Southern Glazer, el mayor distribuidor de vinos y licores de América del Norte, creó una filial dedicada específicamente a la distribución de cannabis en Canadá.
Los fabricantes de refrescos, que han visto sufrir sus ventas a medida que los consumidores se alejan de bebidas con alto contenido de azúcar, tampoco pueden permitirse ignorar la creciente demanda.
Se ha informado que Coca-Cola está discutiendo la producción de bebidas con cannabis con la canadiense Aurora Cannabis. Y aunque PepsiCo dijo este mes que no tenía planes de desarrollar una bebida similar, el director de finanzas, Hugh Johnston, le dijo a CNBC que la compañía todavía "lo mirará de manera crítica".
Analistas de Canaccord Genuity prevén que las ventas de bebidas con THC y CBC podrían alcanzar los 600 millones de dólares para 2022.
Los cerveceros son quienes tienen más razones para involucrarse, pues las ventas de cerveza artesanal ya no crecen tan enérgicamente como antes.
El Distilled Spirits Council ha evitado tomar una posición sobre la legalización de la marihuana recreativa, pero sí dice que las regulaciones sobre el cannabis (impuestos, límites de edad y consumo antes de conducir) deberían ser tan estrictas como las del alcohol.