"Ser reina es cumplirle un sueño a mi mamá", asegura Candela Ávila, la representante de este año por la corona de Las Heras. Hay que creerle: no sólo porque sin dudas su mamá imaginaba a su hija como soberana vendimial, sino porque fue ella quien la inscribió para participar por este cetro: "¡Me anotó mi mamá, y yo no sabía nada! (risas). Me avisó cuando ya estaba inscripta que teníamos que ir a una reunión. Al principio estaba muy sorprendida, pero después decidí jugármela e ir", cuenta.
Candela es hija única. Su familia se compone por Paola, (la madre, encargada de una panadería) y su padre Alberto, quien trabaja en un hotel. Sin embargo, tiene a alguien que, por el cariño, considera su hermano: "Tengo un primito al que quiero muchísimo y lo considero como mi hermanito, se llama Bruno, y está muy presente en mi casa".
A pesar de que llegó al reinado más por el empuje de su madre que por el suyo propio, ahora la reina de Las Heras piensa en grande: "Tengo expectativas muy altas y por suerte, se están cumpliendo. Espero sacar lo mejor de esta experiencia, aprender lo que más pueda y disfrutar, que es lo que todas nos llevaremos. Más allá de querer ganar, lo más importante es no perder nuestra esencia y adquirir todo el conocimiento posible. También quiero generar amistades con las personas con las que compartiré estos días".
La reina se considera una mujer comprometida. Por eso quiere aprovechar su reinado para algo más que los actos protocolares: "Hay varias cosas que ya estoy haciendo. Una es trabajar con un centro tradicionalista de Uspallata, teniendo en cuenta que yo vengo de este pueblo, y me gustaría ayudarlos a crecer. También colaborar con la Casa de la Mujer de Uspallata y de Las Heras. Creo que tenemos que apoyarnos entre todas, hay temas como la violencia de género que preocupan", dice.
Avanzada la charla, la lasherina revela una de sus características personales, pero también su talento y su pasión: "Soy hiperactiva y siempre tuve la necesidad de hacer cosas. Además de lo que te acabo de comentar, toco el saxo y el piano, soy una apasionada de la música. Y he podido volcar todo esto a los chicos; hace varios años ya que pude concretar un proyecto de darles clases de música gratuitas los fines de semana".
Su apego a la tierra en la que vive, al parecer, es fuerte. Tanto que pensó su carrera en esos términos: "Este año termino la Tecnicatura, y tengo pensado seguir la Licenciatura en Comercio Internacional y Aduana. Elegí esta carrera porque siempre pensé en volver a Uspallata y ejercer en la Aduana. Para mí son muy importantes mi familia y mis raíces… También me gustaría poder viajar y me encantaría conocer Italia, por su cultura, que me atrapa. Y más adelante formar una familia".
Para Candela, la fiesta mayor de los mendocinos es muy especial: "A la Vendimia la puedo sintetizar en la palabra 'esencia'. Es tradición y amor, representa quienes trabajan de sol a sol. A ellos a quienes tenemos que homenajear. Me gustaría que las reinas tengamos la oportunidad de pasar un día con los cosechadores, ver su trabajo de cerca".
Para el final, queda una postura sobre un tema vigente, y que no tiene problema en expresar: "Creo que el agua es vida, y sin ella no podemos estar. Más viniendo Uspallata, donde no podríamos hacer nada sin agua. Tenemos que defenderla a como dé lugar".
Ficha personal
Nombre: Candela Oriana Ávila
Fiesta departamental que la coronó: "Retazos de historia"
Representó a: Uspallata y Alta Montaña
Edad: 19 años
Altura: 1,70 m
Cabellos: castaños
Ojos: marrones
Estudios: Tecnicatura en Comercio Internacional y Aduana
Hobby/Deporte: La lectura y Hockey
Red social preferida: Instagram
Se destaca por: su sentido solidario
Versus
Me apasiona / No me gusta
Amo la música / Detesto los tallarines
Positivo / Negativo
Soy muy sociable / Soy hipersensible
Sueño con / Misión cumplida
Hacer feliz a mi familia / Concretar mi proyecto de dar clases de música a los chicos.
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