Que los vecinos tomen medidas de 'seguridad' al momento de sacar sus residuos domiciliarios a la calle es el objeto de una campaña mediática que lanzará esta semana el municipio de Tupungato.
Una seguidilla preocupante de accidentes que vienen sufriendo los recolectores municipales llevó a la comuna a revisar su sistema de disposición final de residuos sólidos urbanos y a programar ciertos cambios, que se aplicarán a futuro de forma gradual.
Colocar carteles en las bolsas que avisen sobre contenidos que puedan ser riesgosos, envolver en cajas u otros envases los materiales punzantes o cortantes antes de ser despachados y aprovechar el día de recolección de escombros para sacar residuos orgánicos (hojas, caca de perros, etc).
Estas son las acciones que se le piden a los vecinos para proteger a los agentes de recolección y, también, a la gente que busca después materiales reciclables en el basural.
Las heridas que se efectúan los recolectores por manipular bolsas que contienen elementos de vidrio o cerámica rotos son más frecuentes de lo esperable. Hace unos quince días, un municipal terminó con un tajo en su antebrazo, que le fue producido por los trozos de una botella de vidrio que iban en una de las bolsas. El joven aún está con parte de enfermo y bajo la supervisión de la ART.
A estos accidentes que ocurren "cada tanto", se les sumó la semana pasada un hecho que despertó el alerta entre los funcionarios del área. Mientras realizaba su tarea cotidiana, un recolector recibió un pinchazo. La aguja había sido sacada a la calle como parte de la 'basura' de una veterinaria. Por suerte, el hombre recibió la atención y seguimiento médico correspondiente y no presentó complicaciones.
Los inspectores de Servicios Públicos enseguida le libraron un acta al profesional responsable de la veterinaria. Sucede que por generar residuos patológicos, este tipo de locales debe contratar un servicio de recolección privado que se ocupe de disponerlos de la manera adecuada.
"Queremos poner en aviso a todos los establecimientos que trabajan con este tipo de objetos que deben adecuarse a la Ley", explicó Roberto Hurtado, director de Servicios Públicos de Tupungato. En realidad, el Ministerio de Salud de la Provincia es el responsable de la "habilitación, acreditación, categorización y control de las unidades generadoras" (Ley 7168 de Residuos Patogénicos y Farmacéuticos). Sin embargo, el municipio tiene un registros de los sitios que piden la habilitación para prácticas de este tipo.
"En los Pet Shops no es necesario un sistema de recolección especial, pero sí en las veterinarias que ponen inyecciones o tienen sala de cirugía", apuntó Alberto Agostinelli, director del departamento de Ventas y Comercio de la comuna. Agregó que deben contratar estos servicios especiales de disposición final de patogénicos las farmacias, los consultorios odontológicos, las clínicas, las bioquímicas, etc.
Aunque "algunos empleados son reacios a adaptarse a los nuevos requerimientos", el titular de Servicios Públicos aseguró que los agentes municipales trabajan con el equipo reglamentario (guantes, barbijo, casco, etc.). "Pese a ello, seguimos teniendo accidentes. Entonces, es clave la ayuda de los vecinos", señaló Hurtado.
Desde la comuna anunciaron que la campaña se lanzará esta semana con gráfica en las calles y spot en radios y canales locales. Dará recomendaciones de cómo sacar la basura y de la necesidad de hacerlo media hora antes de que pase el camión recolector, para evitar que los perros rompan las bolsas.
También quieren colocar grandes canastos de hierro en los espacios verdes de cada barrio para que la gente tire allí las botellas plásticas. La experiencia la iniciaron, con el aporte de la empresa Alco-Canale en la plaza departamental San Martín y ha dado buenos resultados.