Ella está en la cresta de la ola. En el pìco máximo de su fama. Un momento para aprovechar que Camila Rajchman prefiere dejar de lado. Ayer publicó un emotivo video donde se despide de la banda entre lágrimas. En éste habla de nuevos proyectos pero no aclara cuáles son.
"Siempre supe que este momento iba a llegar, pero no me imaginé que fuera a dolerme tanto. Empezamos como un grupo de amigos que nos comprometimos a hacer algo todos juntos, pero tomó dimensiones increíbles. Rombai creció muchísimo, también requiere de mucho esfuerzo y de mucha dedicación. Y por más que me duela el alma y se me raje el corazón, creo que es momento de dar un paso al costado. Por lo que quiero a Fer y por lo que quiero a los chicos", se la escuchó decir a Camila.
Hoy ella fue a Desayunos Informales a contar su historia. El programa es de Uruguay, el lugar donde ella reside. Camila comentó que el momento de quiebre de su carrera ocurrió en el Festival de Villa María donde fue abucheada por desentonar.
“Hubo un punto en el que se desvirtuó todo, nos quedamos muy tristes con la performance. No quedamos para nada a gusto. Compartimos escenario con Soledad, Abel Pintos y Lali Espósito y nosotros estuvimos lejos de estar como queremos”, inició.
“La verdad es que no hay excusas, pero a mí lo que me pasó fue que no me escuchaba y para mí es re importante. Yo canto muy bajito con respecto a cómo suena el resto de la banda y por eso si no me escucho por mi aparato, no me escucho por ningún lado, porque los monitores no alcanzan mi volumen. No nos dejaron que operara nuestro sonidista ni monitorista, entonces me puse re nerviosa y no lo pude manejar. Creo que lo tendría que haber manejado mejor, pero la verdad es que no pude”, siguió ella con mucha humildad.
“La decisión fue tomada en conjunto. Creo que porque todos estamos enfocados en que la prioridad es Rombai. Para mí, cuando empezó, era una banda de amigos que nos re divertíamos y hacíamos boludeces. Pero la gente se involucró, nos quiso y nos pedía más de verdad. Creo que crecimos demasiado rápido y llegó el momento de priorizar lo musical y no lo que queremos o sentíamos”, explicó más.
“Creo que todos estábamos sintiendo que había que dejar crecer a Rombai. Yo llegaba a casa y pensaba: ‘qué tristeza si soy yo la que está frenando a mis amigos’.Obviamente lo que menos hubiese querido es esto, pero siento que es lo que está bien para ellos. Cada vez hacíamos shows más grandes y yo lo dije siempre, no soy cantante. Y tampoco pretendía aprender a cantar tan rápido. La gente me compró, pero lo compró en el boliche, para tener un vaso de cerveza en la mano y saltar con amigos. Pero no sé si lo compró para un show en el Luna Park”, remató.
Esta fue la actuación que generó un quiebre en Camila: