El Congreso arrancó el año electoral con una sesión extraordinaria de la Cámara de Diputados en la que el presidente Mauricio Macri y su ministro de Comunicaciones, Oscar Aguad, fueron el blanco de críticas de la oposición por el acuerdo entre el Gobierno y la empresa Correo Argentino SA, de la familia del mandatario nacional. El oficialismo no los defendió.
Aguad, que ya fue citado para el martes a explicar el acuerdo ante la comisión de Comunicaciones e Informática, que preside su coterráneo delasotista Juan Brügge, fue reprobado como ministro por convalidar el acuerdo que beneficia a la familia del Presidente: algunos diputados reclamaron su renuncia y otros, como el peronista Andrés Guzmán, del Movimiento Evita, anunciaron que promoverán el juicio político en su contra.
Contrariamente a lo que se esperaba, el interbloque Cambiemos no respondió las críticas contra Macri y Aguad.
“¿Qué voy a salir yo a defender algo sobre lo que ni siquiera nos han consultado?”, dijo un importante diputado radical a este diario.
“No voy a hablar”, respondió también la diputada Elisa Carrió, líder de la Coalición Cívica-ARI, antes de ingresar al hemiciclo, promediando las 5 de la tarde.
Su partido, la Coalición Cívica, emitió un comunicado en el que asegura que sus equipos técnicos “están analizando el acuerdo realizado por el Correo con el Poder Ejecutivo Nacional en el marco de las causas derivadas de las mal llamadas estatizaciones impulsadas por los gobiernos K”.
Durante las tres horas en que la oposición fustigó a Macri y Aguad ningún diputado oficialista hizo uso de la palabra. Entienden que el problema del Correo, que afecta la imagen del Presidente, debe zanjarse en la Justicia y el Ejecutivo.
Sin interpelación
Durante la sesión, la oposición pudo despacharse largamente contra Macri, Aguad y el acuerdo Estado-Correo, aunque no reunió los números para interpelar a los funcionarios.
La diputada mendocina Soledad Sosa, del Partido Obrero (PO), pidió un apartamiento del reglamento para lograr que se debatiera un proyecto, que no estaba incluido en el temario, que permitiera interpelar al Presidente, al jefe de Gabinete Marcos Peña y a Aguad.
Pero la solicitud fue rechazada ya que no logró los tres cuartos de los votos afirmativos de los presentes: terminó 113 a 79. “Esta es una usurpación de las finanzas del Estado para rescatar a una empresa familiar”, bramó la diputada Sosa.
Posteriormente, el interbloque federal UNA, que integran diputados massistas y delasotistas, salió con los tapones de punta. Felipe Solá tildó el acuerdo de “vergüenza espantosa” y se preguntó cómo sus colegas radicales aún no pidieron la renuncia de Aguad por haberlo consentido.
El diputado opositor dijo que no cree “en la distracción, sino en la negligencia, en el 'nadie se va a dar cuenta', en el 'dejalo pasar'”.
Tras cartón, la excompañera de fórmula de José Manuel de la Sota en las presidenciales de 2015, la bonaerense Claudia Rucci, calificó de “espurio” el convenio y dijo que “el Grupo Macri desde 1976 le costó mucho dinero a los argentinos”.
También los kirchneristas formularon sus críticas: “La temeridad del Presidente nos sorprende día a día en el uso del poder público para favorecer a su familia y a sí mismo", dijo el mendocino Guillermo Carmona.
Peña admite que Aguad se lo mencionó "al pasar"
El jefe de Gabinete, Marcos Peña, aseguró que el ministro de Comunicaciones, Oscar Aguad, le mencionó "al pasar que había que resolver" la deuda entre el Estado y el Correo Argentino y reconoció que "es posible" que haya habido "ingenuidad" por parte del Gobierno en el tratamiento del tema.
“(Aguad) nos ha mencionado al pasar que había que resolver este tema; con tranquilidad, nunca entramos en detalle ni en discusión porque le dijimos que se haga lo que corresponde, lo que tenga que ver con la ley”, afirmó Peña luego de que el ministro de Comunicaciones aseguró que le había informado sobre el acuerdo con el Correo Argentino.
El jefe de Gabinete también cuestionó “a los que hicieron el perjuicio al Estado y ahora se rasgan las vestiduras igualando esto a los escandalosos hechos de corrupción como los bolsos de (el ex secretario de Obras Públicas del kirchnerismo José) López”.
La empresa contraataca en la Justicia
Justamente, ayer por la tarde el Grupo Macri presentó un escrito de 10 páginas ante la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial para que rechace el dictamen de la fiscal general Gabriela Boquín, quien se pronunció en contra del acuerdo.
Jaime Cibils Robirosa, presidente de Correo Argentino, la sociedad anónima de la familia Macri que tuvo la concesión del servicio postal mientras estuvo privatizado, entre 1996 y 2003, defendió en el escrito la propuesta realizada por la empresa y señaló un "llamativo y espurio manejo de las cifras" hecho por la fiscal, que en su dictamen calculó que la deuda de la compañía con el Estado ascendería en el año 2033 a 70.000 millones de pesos.
El directivo de la empresa de la familia Macri cargó contra el kirchnerismo: acusó a los gobiernos anteriores de lanzar "embates jurídicos y sobre todo políticos" y recordó que, cuando asumió la Presidencia Néstor Kirchner, "decidió por decreto rescindir el contrato de concesión y apropiarse de todos los bienes y activos" de la empresa "sin pagar un solo centavo".
Cibils Robirosa también defendió al Gobierno al señalar que “la Fiscalía acepta que Juan Mocoroa es director general de Asuntos Jurídicos del Ministerio de Comunicaciones” y que, por lo tanto, “su designación es válida”. Dijo también que “no hay alteración al orden público, ni se viola la ley de ética pública cuando se pretende pagar una deuda que no debió haber existido nunca”.