Caló asumió al frente de la CGT oficialista con el apoyo de 102 gremios

El metalúrgico Antonio Caló asumió hoy en la CGT oficialista, advirtió que accionará "contra toda degradación de las relaciones laborales", destacó que defenderá a los trabajadores "sin vacilaciones", ratificó su apoyo al Gobierno y aludió críticamente al moyanismo.

Caló se comprometió a "asumir la responsabilidad de defender el modelo nacional y popular" del Gobierno, al hablar después de ser electo en un congreso nacional del sector, con lo que así quedó formalizada la fractura del sindicalismo peronista.

El titular de la UOM fue electo por el voto directo de 1424 delegados congresales que participaron en representación de 102 gremios del congreso cegetista, que se realizó en el Estadio Obras Sanitarias, de esta ciudad.

El congreso aprobó un documento en el cual se comprometió a "defender la plena vigencia instrumental del modelo sindical argentino con predominio de lo colectivo por sobre el individualismo inducido por el modelo neoliberal".

"Hoy demostramos que tenemos una CGT unida y que utilizamos la inteligencia y la prudencia zanjar las diferencias", resaltó Caló, para luego subrayar que la central obrera afín al Gobierno será conducida en forma "colegiada". Al respecto, el flamante secretario general afirmó: "Esta CGT va a ser colegiada, acá no hay unicato. Hay una CGT para defender los intereses de los trabajadores".

Caló prometió que la nueva conducción de la central sindical "va a caminar a lo ancho y a lo largo del país" para normalizar las delegaciones regionales y permitir que en cada provincia se pueda elegir la conducción para "defender el modelo económico que estamos defendiendo nosotros".

Tras afirmar que esta nueva CGT será "dialoguista", Caló asumió la "responsabilidad de defender el modelo" y advirtió que "cuando veamos que (en el Gobierno) están equivocados se lo vamos a decir con el respeto que se merece".

Caló encabeza el nuevo Consejo Directivo de la CGT, donde estará acompañado por el estatal Andrés Rodríguez como secretario adjunto; el taxista Omar Viviano como secretario gremial; Gerardo Martínez (Uocra) como secretario de Relaciones Internacionales; Héctor Daer (Sanidad) como secretario de Prensa; Ricardo Pignanelli (Smata) como secretario de Interior; Oscar Lescano (Luz y Fuerza) como secretario de Acción Social.

La nómina continúa con Víctor Santamaría (Suther) como secretario de Cultura; Omar Maturano (La Fraternidad) como secretario de Vivienda y Turismo; Roberto Fernández (UTA) como secretario de Actas; Norberto Di Próspero (APL) como secretario de Asuntos Legales; Horacio Ghilini (docentes) como secretario de Estadística; Noé Ruíz (Modelos) como secretaria de Igualdad de Género; José Luis Lingeri (Aysa) como secretario de Acción Social; y Jorge Lobais (AOT) como secretario de Industria y Producción, entre otros.

"Los trabajadores organizados vamos a defender al Gobierno nacional y popular, y por la memoria de Néstor Kirchner indudablemente vamos a respaldar a nuestra Presidenta (Cristina Fernández)", garantizó Andrés Rodríguez, luego de advertir que "no vamos a permitir" acciones como las que antes era "los golpes militares y ahora pretenden ser los golpistas de la gente".

En el documento que emitió la nueva CGT se comprometió a "defender el modelo sindical con predominio de lo colectivo por sobre el individualismo inducido por el modelo neoliberal".

"Actuaremos con decisión y sin vacilaciones en contra de toda degradación contractual de las relaciones laborales", amplió. En el texto se comprometieron además a "defender el Sistema Solidario de Salud que tiene como instrumento central a las Obras Sociales Sindicales" y se reclamó la "exclusión de todos los actores ajenos al sistema solidario integrado interesados sólo en el lucro".

La CGT reclamó además la "universalización de las Asignaciones Familiares sin topes ni segmentaciones arbitrarias para todos los trabajadores convencionados", y pidió "una suba extraordinaria en los haberes de los jubilados que permita a los pasivos cubrir las necesidades básicas".

Por otra parte, se solicitó "la normalización de todos los organismos de la administración de la seguridad social que fueron intervenidos o en los que fuera modificada su estructura administrativa durante el auge del liberalismo económico". Demandó también "la eliminación del IVA para los productos de la canasta básica para los trabajadores y jubilados que perciban el haber mínimo y la exención del impuesto a las ganancias para todos los trabajadores convencionados en relación a sus ingresos".