Cada vez menos jóvenes celebran en Potrerillos

Armaron sus bolsos, hicieron las compras, alquilaron cabañas y organizaron cada detalle para pasar un fin de semana de festejo en la montaña. Es que este año, al ser viernes, la celebración por el Día del Estudiante se estiró hasta el domingo.

Así más de 2.000 jóvenes mendocinos se trasladaron hasta Potrerillos y se distribuyeron principalmente entre Las Vegas y el Salto. Un número relativamente bajo comparado con años anteriores, cuando hasta allí supieron llegar más de 10.000 personas convirtiéndolo en un "boom primaveral".

Entre los motivos que desalientan la escapada de muchos jóvenes aparecen, por un lado, los estrictos controles de bebidas alcohólicas y, por el otro, las atractivas propuestas musicales en distintos puntos de la provincia. A lo que se le suma en muchos casos, la dificultad para encontrar alojamiento.

En uno de los operativos de control frente a la proveeduría de Potrerillos, el comisario José Rili detalló que la cantidad de jóvenes que eligen festejar en ese paraje montañoso ha disminuido en relación a años anteriores. "Las salidas de los jóvenes ya no se concentran tanto en Potrerillos, sino que se distribuyen en varios puntos. Algunos van al Carrizal y otros participan de los eventos como los que hay en el Valle de Uco", precisó.

Por su parte,  Beatriz Varela, directora de Relaciones con la Comunidad, informó que los jóvenes comenzaron a llegar durante la tarde del jueves y se estima que se quedarán hasta mañana. En concreto se trasladaron hasta allí unos 700 chicos durante el jueves, 1.000 más hasta el mediodía de ayer y esperaban superar los 2.000 para la tarde. "En general son estudiantes del colegio secundario y hasta ahora han estado muy tranquilos", dijo la funcionaria.

Juventud a pleno

Ayer al mediodía distintos grupos de jóvenes caminaban por las calles de Las Vegas buscando juntarse con sus amigos, mientras que otros aprovechaban el sol para broncearse, jugar a las cartas y tomar mate.

En el patio de una cabaña frente a la calle principal de ese paraje montañoso Valentín, Santiago, Lucas, Luciana, Sabrina (junto a otros excompañeros del secundario) improvisaban una red de vóley con banquitos y planeaban las actividades para las siguientes jornadas. "Nosotros venimos hace tres años porque un compañero tiene esta cabaña, así que no tenemos que alquilar", contaron.

Como muchos de ellos ya comenzaron sus estudios universitarios tenían previsto aprovechar estos tres días para descansar y divertirse. “Es una escapadita en una época difícil, porque hay mesas de exámenes, pero por suerte nos tocó viernes, sábado y domingo”, remarcaron. Para las comidas ellos compraron carne para asado, pero también arroz y fideos para compensar el gasto.

Los amigos Juan, Álvaro, Miguel, Estéfano, Juan Cruz, Agustín y Patricio alquilaron una casa para 12. "Algunos se quedan todo el fin de semana y otros se vuelven porque tienen que estudiar", contaron los jóvenes, que egresaron del secundario el año pasado.

Para ellos se trata de una buena fecha para pasarla bien y descargar las tensiones del año. "Vienen muchos jóvenes así que algunos se organizan y hacen fiestas a la noche", comentaron. Remarcaron que les costó encontrar cabaña, sobre todo por el precio. "En unas nos querían cobrar por persona y en dólares",aseguraron y detallaron que finalmente encontraron una a $2.000 por noche.  En cuanto a los controles se mostraron conformes y destacaron que igual pueden pasarla bien sin tomar alcohol.

Con gran entusiasmo Rocío, Lucía, Brisa, Valentina, Magdalena y Agostina del Colegio Universitario Central, recorrían las calles de Las Vegas. "Es la primera vez que venimos, así que esperamos pasarla muy bien", manifestaron. Precisaron que eligieron ese lugar para festejar su día para encontrarse con otros alumnos del mismo colegio. "Vienen varios chicos, así que seguramente los veremos por acá", señalaron.

También contaron que no les fue fácil encontrar alojamiento. "Empezamos a buscar hace más de un mes  y sólo nos dejaron alquilar por ser chicas solas", recordaron.

Cargando heladeritas y bolsos varios compañeros del colegio Manuel Belgrano esperaban para ingresar a la cabaña que se convertirá en su hogar del fin de semana. "Por suerte es de un amigo así que no tuvimos que alquilar", comentaron Romina y Florencia. Una vez que terminaran de acomodarse tenían planeado ir al río. "Queremos pasarla bien y tranqui entre nosotros", resaltaron.

Insólitos escondites para bebidas

Como los operativos en los que se decomisa bebidas alcohólicas durante los festejos del Día del Estudiante se repiten desde hace unos años, muchos de los jóvenes que suben a Potrerillos han implementado creativas estrategias para evitar que les quiten las botellas.

Miembros de la división de Diversión Nocturna del Ministerio de Seguridad encargados de los puestos de control, enumeraron los lugares más insólitos en los que encontraron alcohol. "Uno de los que más nos sorprendió fue un envase de champú. Yo lo batí para comprobar si era eso y lo noté muy líquido. Cuando lo abrí me di cuenta inmediatamente por el olor que no era para lavarse el pelo", relató una de las mujeres. El segundo lugar que enumeraron fueron los termos. "Muchos hacen como que van tomando mate, pero en realidad tienen adentro fernet u otras bebidas", contaron.

Un tercer lugar que mencionaron fueron los parlantes del auto. "Nos pasó con un chico al que lo traía la madre, así que lo empezó a retar delante de todos", comentaron. También recordaron que se habla de la práctica de que los jóvenes suben antes para enterrar el alcohol y después buscarlo, pero durante la tarde de ayer no encontraron ningún escondite.