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14-04-2024
Por estos días, varios de los referentes mileistas en el gobierno y en el Congreso le dificultaron las tareas al presidente con sus excentricidades y torpezas. Algunos con declaraciones delirantes como las de los Benegas Lynch en defensa de una educación no obligatoria, privatizada y pagada (todo lo contrario de lo que construyó Sarmiento) y otros transformando a las cámaras de diputados y senadores en escenarios de divisiones y chifladuras de toda índole. Malas compañías para un presidente que no debería perder el tiempo con esas tonterías producidas por los que se suponen deben defenderlo.