Impulsan una ley para que las mamás que perdieron a sus hijos tengan habitaciones separadas en las maternidades de los hospitales. El proyecto presentado por el senador Mauricio Sat (PJ) consiguió media sanción por unanimidad y pasó a Diputados.
La iniciativa plantea un protocolo para corregir prácticas hospitalarias en efectores públicos y privados. La idea es proteger a las embarazadas que sufren la pérdida de su hijo. Las medidas son para preservar a la mamá antes del parto y en la sala de maternidad.
El proyecto se trabajó en conjunto con la Agrupación "Rugido de Esperanza" a lo largo de más de un año y si se llega a convertir en ley, Mendoza sería la primera con este sistema en el país.
"Hay un vacío normativo que a su vez, deriva en una práctica médica que no es la adecuada para la difícil circunstancia en que las progenitoras se encuentran en ese momento, y es deber del Estado, el que esas mujeres se sientan protegidas y contenidas frente al dolor de perder un hijo. Hoy por ejemplo, las mujeres que padecen esta dramática situación, terminan en la misma sala donde otras mujeres disfrutan de la felicidad con su bebé, con el impacto psíquico y emocional que eso conlleva", explicó Sat.
Estas circunstancias, configuran violencia de género y violencia institucional sobre las mamás, sumado al hecho de que en la actualidad, los hospitales no contemplan tampoco habitaciones adecuadas para proteger a la mujer de este traumático evento.
"Creemos necesario que se mejoren estas prácticas en maternidad, porque no solo estaremos efectivizando derechos, sino también atenuando el impacto en muchas familias a las que lamentablemente les toca pasar por esta instancia", remarcó.
La norma garantiza a la mujer a ser tratada con respeto, de modo individual y personalizado, con garantía a la intimidad durante todo el proceso asistencial, teniendo en consideración sus pautas culturales, y tiene un plazo de aplicación de 120 días a partir de la sanción definitiva.