La fiscalía de Rivadavia decidió ampliar la investigación hacia los centros de salud y hospitales de la región, para dar con alguna pista que permita dar con la madre del bebé que fue encontrado muerto, mordido por los perros, en un callejón del distrito de Santa María de Oro.
Hasta el momento, uno de los pocos datos concretos que existen en la investigación es que se trata de los restos de un bebé de sexo femenino que fue arrojado en el interior de una bolsa de consorcio, de la que unos perros consiguieron sacarlo.
El macabro hecho ocurrió en la tarde del miércoles, en calle San Lorenzo, de Santa María de Oro, una zona rural, donde predominan los cultivos y las casas se encuentran separadas unas de otras por decenas de metros.
"Lo que se encontró fue la parte inferior de un bebé de sexo femenino; también una bolsa negra con sangre y lo que se presume es la placenta", señaló a este diario el comisario general Eduardo Impellizzeri.
Las hipótesis
Según el comisario, una de las hipótesis más firmes es que el bebé haya nacido con vida. Si esta teoría se confirma con las pericias forenses, se estaría frente a un homicidio y no a un aborto.
"Se está realizando un rastrillaje en toda la zona, no solo para buscar huellas o rastros que puedan orientarnos sino para intentar dar con mujeres que hayan estado embarazadas en este tiempo", agregó Impellizzeri.
En ese sentido, la investigación descartó a dos jóvenes mamás que cursaban el último tiempo de sus embarazos y que viven en la zona, aunque en ambos casos se supo que las mujeres dieron a luz y que sus hijos se encuentran en buen estado.
Así, la investigación de la fiscalía se amplió a los centros de salud y hospitales de la región, con la idea de buscar elementos que permitan sospechar de alguna situación: "Lo más probable es que la madre de esta criatura no viva muy lejos y que en algún momento se haya hecho atender, por lo que sus datos deberían estar registrados. Solo hay que verificar quiénes y dónde dieron a luz", señalaron desde la Justicia.
