Buen debut copero del maipucino. Alternó la posición de volante interno con la de enganche e intentó darle fútbol al equipo. Guapeó y asistió al Morro en la situación más clara del partido: el cabezazo del uruguayo que todos gritaron y no entró".
Palabras textuales con las cuales el suplemento +Deportes calificó a Ezequiel Bullaude el día de su debut en la Copa Libertadores de América, luciendo la camiseta de Godoy Cruz. No será un día más el 5 de marzo del 2019. Quedará grabado a fuego en su carrera futbolística.
El pibe del barrio "Brandi" de Maipú con sólo 18 años tuvo su bautismo de fuego. Y fue contra un rival de fuste, con historia: Olimpia de Paraguay. Más allá de su actuación, lo mejor de la noche, llegó a los 34 minutos del segundo tiempo. El DT Bernardi metió el primer cambio del partido y Kevin Gutiérrez reemplazó a Bullaude. Y las más de 15 almas tombinas presentes en el Estadio explotaron en un solo aplausos. El pibe se fue ovacionado por propios y extraños. Jugó un partido perfecto. Y tanto el cuerpo técnico, compañeros y público en general se lo reconoció.
Pasaron 72 horas de esa noche histórica. Sueño cumplido para él y su familia. Y los mensajes por las redes sociales y WhatsApp aún continúan llegando. Felicitaciones por doquier. Fiel a su estilo, Ezequiel, mantiene los pies sobre la tierra. Reconoce que está viviendo una etapa de su carrera formidable y que trabajó duro y mucho para jugar en este nivel, sin embargo, es consciente que ahora, llega la etapa más difícil, mantenerse.
En la previa del partido con Rosario Central por la 22° fecha de la Superliga, la flamante "joyita de la cantera tombina", dialogó con +Deportes y contó sus sentimientos:
- No terminas de disfrutar el partido con Olimpia por la Copa que ya se viene Rosario Central...
- La verdad, trabajé mucho para llegar a este lugar, uno sacrifica muchas cosas cuando es adolescente por entrenar y tener esta chance en el fútbol. Por esta razón, hay que mantener los pies sobre la tierra y seguir trabajando y entrenando de esta manera. La clave en este momento es mantenerme en este nivel y seguir sumando minutos de juego.
- ¿Qué sentiste cuando el árbitro indicó el inicio del partido. Tu debut en Copa Libertadores?
- Estaba muy concentrado. Sabía bien lo que tenía que hacer adentro de la cancha. No estaba nervioso. Quería disfrutar cada segundo. Me sentí cómodo.
- ¿Cuándo te enteraste que ibas a ser titular en el debut del Tomba en la Copa 2019?
- En el último entrenamiento antes del partido. Hicimos un táctico. Separaron los equipos, suplentes por un lado, titulares por el otro. Como no me habían nombrado, pensé que quedaba afuera, sin embargo, me llamaron y entré en el equipo titular.
- Al ser el jugador más pequeño en edad, el DT Bernardi habló con vos y te brindó toda su confianza. ¿Qué fue precisamente lo que dijo?
- Lo primero que me dijo fue que jugara tranquilo. Que me sacara de encima toda presión. Que toda la responsabilidad que yo estuviera en la cancha era absolutamente de él.
- Participaste en la jugada más clara del Tomba, tiraste un centro perfecto a la cabeza del Morro. Todo el estadio gritó gol, ¿vos también te sumaste al festejo?
- Con la mano en el corazón, la vi adentro. No lo grité, pero no podía creer que no haya ingresado al arco la pelota. Se movió la red y todo. Fue un centro pasado, se quedó la pelota, trabé y le tiré un centro al área para el Morro o Lucero, salió bien el centro, pero el cabezazo no quiso entrar.
- Dejando de lado de tu debut Copero, ¿por qué Ezequiel Boullade juega al fútbol, si toda su familia materna viene del básquet, como tíos, mamá, primos (Matías Sandes, Juan José Naman), etc?
- Es verdad, por el lado de mi mamá, todos juegan al básquet, pero mi viejo es muy futbolero. Jugó en Maipú y desde chico me acompañó a todos lados, aún recuerdo como me acompañaba todos los días a la escuela del Lalo Bazán en Maipú. Arranqué a los seis años.
- A los 12 años, tuviste tu primera experiencia en Buenos Aires pero en 18 meses, te dejaron libre dos veces…
- Tal cual, cuando tenía 12 años recién cumplidos me incorporé a la inferiores de Argentinos Juniors. Sin embargo, al año quedé libre. Inmediatamente me sumé a Lanús, pero me dejaron libre a los seis meses. Increíble. Por esta razón, me volví a Mendoza.
- Muchos chicos y más a esa edad, tras la frustración dejan de jugar al fútbol o no buscan otra oportunidad para estar en el fútbol grande...
- El apoyo de mi familia fue fundamental. Me apoyaron siempre. Volví a Mendoza y me incorporé a las divisiones inferiores del Tomba. Era novena división. Ahí encontré a mi padre futbolístico, Alberto Isaías Garro. Me enseñó y me aconsejó mucho. Fue clave para que no bajara los brazos e incorporara conceptos nuevos a mi juego. Después, me marcó mucho Miguel Nievas con quien en sexta división ganamos todo. Llegó el llamado de Dabove a Reserva y años después, Larriera me llamó para entrenar en primera división.
- Por último, debutaste en primera con 17 años, en la Copa Libertadores con 18, sueños que se hicieron realidad. ¿Y ahora?
- Cómo todo futbolista, vestir la camiseta de la Selección Argentina mayor es lo máximo. Jugar en Europa sucede a cualquiera. Pero, ahora, quiero afianzarme en la primera de Godoy Cruz. Jugar mucho tiempo. Defender estos colores, pelear los primeros puestos en la Superliga y en la Copa. En la actualidad, Godoy Cruz, te exige ser protagonista y pelear arriba. Hay que enderezar este barco, no arrancamos bien el año.
Y la gran chance de levantar la tendrá esta tarde ante Rosario Central. El DT Bernardi aún no confirma el equipo. Piensa en la Copa. Bullaude es duda, pero “la joyita” se muere por jugar.
Ficha personal
Ezequiel Bullaude
Nacimiento: 26 de octubre de 2000 (18 años).
Padres: Eduardo y Mónica
Estudios: le quedan dos materias para teminar el secundario. Y este año arranca a estudiar primer año de Inglés.
Hermana: Bárbara
Estado civil: Soltero.
