Tres hermanas de 17, 18 y 19 años asesinaron a su padre a puñaladas y martillazos en la cabeza. Según informaron los medios locales, las jóvenes actuaron para acabar con años de maltratos.
El cuerpo de Mijaíl Jachaturián (57) fue hallado el viernes pasado cerca del ascensor de su departamento en Moscú. Tras el hallazgo, la Policía detuvo a sus tres hijas quienes admitieron haber cometido el crimen.
Según el canal de televisión 360, las mujeres ya tenían planeado asesinar al hombre a quien atacaron mientras estaba en su sillón.
"La menor lo apuñaló. La segunda de las hermanas empleó un martillo para romperle el cráneo, mientras que otra roció gas a la cara del tirano. El hombre se resistió y pudo herir a su hija mayor", informó el canal de televisión 360.
Otra versión difundida por la agencia RIA Nóvosti, dice que el hombre atacó a una de sus hijas con un cuchillo, y otra de las hermanas le quitó el arma y le apuñaló.
Según la misma fuente la menor de las hermanas apuñaló al menos 35 veces a su padre, la del medio le golpeó 10 martillazos en la cabeza, y la mayor le roció con gas pimienta en la cara y lo apuñaló en el corazón. Las acusadas dijeron que el hombre había atacado a su hija cuando estaba bajo los efectos de las drogas.
Además, aseguraron haber sido víctimas de maltratos físicos y psicológicos durante años. De acuerdo al relato de varios allegados, la madre de las jóvenes huyó de la casa para escapar de su esposo y sus maltratos.