Brusadín: “Soy un eterno agradecido”

El árbitro más reconocido a nivel nacional es un amante de la disciplina. Dirigió nada más y nada menos que cuatro copas mundiales.

Brusadín: “Soy un eterno agradecido”

"Mi historia con el fútbol de salón comenzó yendo a ver los partidos porque mis hermanos jugaban en Regatas que jugaban con esa camada de José Elespe y del "Gordo" Garbín, esos monstruos que jugaban los clásicos ante Talleres donde estaban Fiti Estrada, Beto Lucero y Perico Pérez. Luego me arrimó un amigo del barrio que me llevaba a ver a su hermano jugar que era Sergio Tomás y que para mi fue uno de los mejores jugadores que pisó las canchas del fútbol de salón de Mendoza" dice quien fue y es un ícono del arbitraje a nivel nacional e internacional.

Justamente sobre su llegada al arbitraje contó: "Yo tenía 18 años y me llamaba la atención el arbitraje. Le prestaba mucha atención a los árbitros y me dediqué a esto que hasta hoy es una pasión que por momentos asusta porque no puedo alejarme. Tuve mi paso como jugador fue en el club Garelli, que quedaba donde hoy está Cerede, pero fue corto, nunca participamos de algún campeonato, fueron sólo amistosos".

Sobre sus comienzos en el fútbol de salón a nivel nacional, Brusadín recordó: "yo debutó justo cuando se parte la federación. Fue justo después del Mundial '94 que se hace en varias provincias del país, lamentablemente no fue bueno porque hubo mucha desorganización, y a raíz de eso se parte la confederación y de un lado queda Pedro Bonettini que hasta hoy es el presidente y del otro Fernández de Buenos Aires, bueno justo se da un torneo nacional en Mendoza y debutó ahí, en el '95 y dos años más tarde a nivel internacional acompañando a Jockey a Sudamericano en Montevideo".

El presente de Darío Brusadín con el futsal también llega de la mano del periodismo: "con mucho respeto con los periodistas yo intento desde ese lugar con las transmisiones y mi página (futsalconnivel.com.ar) darle difusión a este querido deporte

"Para mi el futsal es algo muy importante en mi vida. No sólo me educó. . Cumplí 25 años dirigiendo. Este es un deporte de caballeros donde se cuida la disciplina y en más de una oportunidad dirigir un partido me permitió llevar a mi casa un tarro de leche o parar la olla, entonces soy un agradecido eterno al fútbol de salón. Muchos dirigentes me dieron una mano y con algunos por ahí no terminamos bien la relación como por ejemplo con Oscar Bruno que fue muy importante  en mi primer mundial y él me ayudó a recuperar mi lugar. Con Pedro Bonettini con quien tengo muchas diferencias, siempre me ayudó a nivel internacional".

Dos personas que ya no están físicamente dejaron su marca en la vida del "Brusa", Juan Carlos Invernizzi y Gabriel García Moyano: "Juan Carlos era un señor con todas las letras. Nunca iba a levantar el tono de voz para protestar, un gran tipo que le dio junto a Elespe le dieron mucho a Regatas. Un tipo muy humilde y todo lo que tenía te lo daba. Y el 'Chupete' me enseñó todo lo que se de periodismo. Un tipo que vino a pedir trabajar conmigo porque le gustaba el programa. Él ayudó a mucha gente y que se conoció cuando murió. Ayudó mucho a esta etapa del Jockey con mucha gente más".

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