El virtual entrenador de Independiente,
Miguel Angel Brindisi
, reconoció que "descender es una posibilidad" y que "solo faltan detalles" para finiquitar su contrato que durará hasta junio de 2014.
"Descender es una posibilidad, hay que ser realistas, es un camino espinoso. Hay que dar una mano porque Independiente está en un estado crítico", admitió Brindisi en diálogo con Fox Sports.
El técnico que ganó en el club el Clausura 1994, la Supercopa 1994 y la Recopa 1995, confesó: "todavía no está todo, faltan detalles. Está definido en un 90 por ciento, hay muchas cosas que hay que tratar".
"Tenemos que seguir charlando para definir el cuerpo técnico, los lugares de entrenamiento y todo muy rápido, para asumir mañana mismo, si se dan los tiempos, porque vivimos en una vorágine", consideró.
Luego Brindisi contó: "a las siete (de la tarde) me dicen te enteraste (Jorge) Fossati no arregló, llego a mi casa y es un bombardeo de llamadas. Yo pensé que arreglaban Fossati o Enzo (Trossero)".
Y siguió: "a mí me había citado a las 3 de la tarde, y le di mi punto del vista, el vicepresidente (Rubén Vázquez). No fue un ofrecimiento. Le dije que tenía que ser un hombre de la casa dentro de la terna que era Fossati, Trossero o alguien del club".
"Me encantaría que esté Gabriel Milito en mi cuerpo técnico, que esté en el campo como ayudante. Por lo monstruo que ha sido como profesional se lo necesita", afirmó.
Brindisi destacó: "no hablé con ningún jugador del plantel, lo tuve a Rolfi (Daniel Montenegro), a (Claudio) Morel (Rodríguez) y (Fabián) Vargas, pero no hablé".
"El equipo quedó acéfalo y se necesitaba un técnico. Ahí me llama (Javier) Cantero y como no iba a ir a la reunión le dije que me dejara pensar. A Carlos (Squeo) hace rato que no lo veía, pero voy a trabajar con mi gente", subrayó.
Y continuó: "Cantero es una persona de bien y yo me tomé hasta hoy para aceptar. El contrato será hasta julio de 2014 y hay que definir la gente que me va a acompañar. Hablé con Cantero a la mañana, no sé si me presentan a la tarde y mañana empiezo a trabajar".
"No sé donde salió que yo hable con Julio (Grondona). Con Julio no hablo hace mucho y si me llamó, que problema hay. Cuando vine en el `94, Julio me deseó suerte, hay una amistad de años", aseguró, para desmentir la versión de la intervención del presidente de la AFA.
El entrenador se esperanzó en que "todo comienzo es un relanzamiento. Hay que sumar en lo anímico de los jugadores. Es un momento para los grandes, sin descartar a los chicos, que tienen la responsabilidad en este momento".
"Tengo que buscar el sistema, pero el mejor es el que va por los puntos, acá no hay misterio desde esa intención. A los arqueros los voy a evaluar cuando esté con ellos", adelantó.
Y agregó: "vengo a dar una mano, a dar la cara, pero acá esto es entre todos, porque estamos jugados. Pero se sale con trabajo, con profesionalismo. Lo importante es que a nadie le quede nada guardado cuando se termina el partido".
"Independiente tiene un excelente plantel y se debe hacer hincapié en lo anímico para saber que se puede. Maximizar la entrega. La gente reacciona por lo que recibe en el rectángulo", condicionó.
Sobre el final, confesó: "mi portero me dijo +en qué fuego te metiste+, mi familia me dijo no y después fueron cambiando de opinión. El club no podía quedar acéfalo".
El plantel rojo, en tanto, volvió esta mañana a los entrenamientos en el predio de Villa Domínico, bajo las órdenes de Manuel Magán y Juan Cruz Anselmi, coordinadores del fútbol juvenil, y a puertas cerradas.
Además, estuvieron Ariel Wiktor, técnico de la reserva, junto con Héctor Galarza, preparador físico, y José Pepe Santoro, quien trabajó con los arqueros.