El extremo sur riojano es el albergue de docenas de cóndores. A 180 kilómetros de la capital provincial, la Quebrada del Cóndor es la morada de 150 cóndores que planean cerca, muy cerca, de los visitantes.
Desde el paraje Tama hay que partir hasta Sierra de los Quinteros y desde ahí, luego de una cabalgata de un par de horas, entre vertientes de agua que se multiplican alimentando un imponente verdor y manantiales que forman quebradas con grandes piletones naturales, se alcanza el peñón rocoso que oficia de mirador para los dueños del lugar.