En la semana en que la interna de la AFA había entrado en una tensa calma, eclipsada quizás por los amistosos de la Selección y la previa de los múltiples clásicos de la fecha, el Diario Perfil accedió a una información que puede cambiar el escenario político de aquí a la Asamblea del 22 de octubre: Marcelo Tinelli le dijo a su círculo más íntimo que bajará su candidatura.
La noticia aún no circuló en el ámbito dirigencial de la AFA, ni del lado del presidente Luis Segura ni del de los directivos que sostienen y apoyan la postulación de Tinelli. El conductor televisivo se lo dijo a muy pocas personas de su entorno más cercano. Y dos de ellas se lo reconocieron a ese diario.
Aludió dos razones principales para tomar esta decisión. La primera es el desgaste que le provocó el último mes de conflicto en la AFA, lo que originó un sinfín de elucubraciones acerca de su futuro y críticas despiadadas en medios de comunicación y redes sociales, donde por lo general es venerado y adulado de manera masiva.
La segunda razón tiene que ver con su agenda: Tinelli advirtió que la situación actual del fútbol argentino requiere un trabajo de tiempo completo, al estilo Julio Grondona, que le dificultaría compatibilizar con su programa televisivo y le imposibilitaría tomarse las licencias a las que está acostumbrado: vacaciones prolongadas en Punta de Este y escapadas sistemáticas a Europa.
Todo eso, más el pedido de algunos de sus hijos, confluyó para que Tinelli perdiera fuerzas.
Ante la consulta de Perfil, los directivos que apuntalan su candidatura negaron tal situación: “Está recontrafirme”, afirmó Roberto Fernández, el presidente de la Liga Marplatense y hasta el mes pasado la máxima autoridad del Consejo Federal, despedido por Segura luego de que explicitara su apoyo a Tinelli.
La puja por la restitución de Fernández es uno de los motivos de la decisión que Tinelli le habría contado a su entorno. El retorno del marplatense al Consejo Federal era uno de los puntos del llamado Pacto de Viamonte, que se partió en mil pedazos cuando el presidente de AFA no lo restituyó.