Camila Speziale y Hernán Pérez Orz son nuestros flamantes héroes argentinos, que fueron amenazados con armas de fuego al querer abordar la gigantesca plataforma petrolera rusa Gazprom, como si fueran delincuentes. Ellos siguen arriesgando sus vidas con el objetivo de hacer reflexionar a los directivos de la empresa para detener sus peligrosas actividades: perforación de los fondos marinos del océano Ártico.
Defender el Ártico hoy es el primer objetivo para salvar al planeta. Oponerse con argumentos burocráticos, egoístas o errados, nos retrotraería a la convincente metáfora del Titanic: "Mientras discuten temas superfluos, la cubierta del barco se inclina cada vez más". Todos estamos en este barco.
Rusia también, por eso el imputarlos de "actividades de piratería" simboliza una bofetada contra la emergencia internacional por la cual hoy clama el mundo, agravándose al ser condenados a dos meses de prisión preventiva con opción a 15 años de prisión.
Vladimir Putin lo calificó como "error conceptual". No obstante aprueba el castigo contra los activistas por afectar "determinadas leyes internas" de su país (emerge nuevamente la "metáfora del Titanic"). Increíble ceguera de insolidaridad global ante un magno emprendimiento científico, noble y pacifista.
El "AMEG" o "Grupo de Emergencia del Metano en el Ártico", está integrado por científicos del clima de alto nivel. Su última evaluación fue cuando se preguntó: "¿Podría el mundo estar en un inminente peligro y no decirlo nadie?". ¿Se confunde el silencio con la complicidad ante el explícito alerta de una "emergencia climática planetaria?"
Las últimas investigaciones sobre la inmensa plataforma continental siberiana dicen que es la mayor del planeta y su fondo marino helado, llamado permafrost, se encuentra en un veloz proceso de derretimiento que, debido a su poca profundidad, se le suma el incremento térmico del aire y de las aguas oceánicas del Ártico.
Si analizamos la potencialidad del hidrato (condensado de metano ), nos sorprenderá que un volumen interno del mismo equivale a 170 volúmenes de metano liberado y si los incrementos térmicos desde 2007 continuaran, se alcanzarían temperaturas desde los 9° C a los 10° C. Luego se aceleraría en el Ártico el derretimiento del mismo, liberando "todo el metano de sus hidratos", almacenados a lo largo de miles de años.
Peter Wadhman, profesor de física oceánica de la Universidad de Cambridge, comunicó a la BBC que en el norte de Siberia, se calentó el agua 5° C en el verano, "hasta el fondo del mar", derritiendo el permafrost helado de "altamar".
¡Qué velocidad! De proseguir esta tendencia, aceleraría velozmente el derretimiento del hielo submarino frente a las costas poco profundas de Siberia, Alaska y Canadá: inmensos potenciales de "puntos de partida" como posible invasión de metano a la atmósfera. O sea, una bomba de tiempo climática sobre el Polo Norte, quizás con posibilidades posteriores en escala hemisférica.
Hace 5 años (setiembre 2008 ) científicos rusos demostraron cómo columnas de millones de toneladas de metano subían a la atmósfera, desde los fondos marinos del océano Ártico frente a las costas de Siberia, obviamente inviables para perforaciones petroleras en general y hoy en particular.
Que es lo que observa Greenpeace por Gazprom, arriesgando posibles desequilibrios en el subsuelo marino, precursoras alteraciones contaminantes en el permafrost helado, presiones mecánicas, accidentes con vertidos de petróleo sin control, etc.
Ante tan graves novedades climáticas en Rusia, sus autoridades técnicas y oficiales, ¿no estaban informadas de las mismas, como tampoco no pudieron o no quisieron diferenciar entre un acto de "piratería" con el de un emprendimiento que ennoblece al ser humano por ser activistas protectores del planeta? Que eso es lo que son Camila, Hernán y demás integrantes de Greenpeace.
En síntesis, en vez de esperar peligrosamente un grave y posible error de justicia, por lo tanto irreversible, hoy, ante una definición extrema de castigo, ¿no sería posible que interceda directamente el presidente Vladimir Putin, como máxima autoridad política para con urgencia liberarlos?
Jorge López de Medina - DNI 6.861.764