Si algo faltaba para confirmar que Jamaica es la principal potencia mundial de las pruebas de velocidad era ganar la posta 4 x 100 metros. Y el país centroamericano lo hizo con un tiempo de 37’’36, relegando a Estados Unidos (37’’66) y Canadá (37’’92), que subió al podio por la descalificación de Gran Bretaña.
Así, Usain Bolt, imparable en el último tramo, consiguió así su tercer oro en Moscú 2013 y se convirtió así en el atleta con mejores resultados en la historia de los mundiales de atletismo, con 8 primeros lugares y dos segundos. Carl Lewis también sumó diez preseas con ocho triunfos, aunque tiene una plata y un bronce.
Bolt repitió de esta manera las tres victorias que había obtenido en los Juegos Olímpicos de Londres 2012: además de la prueba conjunta, se llevó el oro en los 100 y los 200 metros. En esta ocasión, el el campeón olímpico estuvo acompañado por Nesta Carter, Kemar Bailey-Cole, Nickel Ashmeade.
Sumar tres oros en las principales pruebas de velocidad ya es casi una costumbre para Bolt: además de Londres 2012 y Moscú 2013 lo había conseguido en Pekín 2008 (Juegos Olímpicos) y Berlín 2009 (Mundial).
En Daegu 2011 también se llevó los oros en los 200 metros y la posta 4x100, mientras que en los 100 metros fue descalificado por una partida en falso. En Osaka 2007 fue cuando se subió por primera vez al podio en los mundiales, cuando ganó las medallas plateadas en los 200 y en la prueba de relevos.
La prueba había arrancado desfavorable para el conjunto centroamericano, que remontó cuando promediaba el trayecto y logró estirar la ventaja sobre el final gracias a la velocidad de Bolt y a la demora en el paso del testigo a Justin Gatlin, el cuarto de los estadounidenses.
Gigante en todo
A los 15 años ganó el oro en los 200 metros del Mundial junior y a medida que fue creciendo se fue convirtiendo en un gigante (1,95 metros, 92 kilogramos), pero capaz de volar sobre la pista.
Es conocido por su condición de “showman” en el estadio, haciendo gestos y tratando siempre de atraer la atención de las cámaras, incluso antes de las carreras, cuando el resto parecen ultraconcentrados y con la mirada perdida, mientras él está sorprendentemente relajado.
La amplitud de su zancada y sus carreras perfectas en Pekín-2008 y Berlín-2009 fueron analizadas por los expertos y la prensa lo bautizó como el “Extraterrestre” del atletismo actual.
Bolt volverá a Pekín, una ciudad que le trae buenos recuerdos, en el Mundial de 2015, camino de su objetivo real: Río-2016.
