Cerca de seis mil alumnos del primer año de la Formación Docente en Mendoza se enfrentarán hoy a un examen, que medirá con qué nivel de competencias en comprensión y producción de textos, así como de resolución de problemas, ingresan a sus carreras.
Este examen despertó gran polémica el año pasado al ser anunciado, pues trascendió que se pensaba como un ingreso restricto. La misma controversia continúa. En algunos Institutos de Educación Superior los alumnos han decidido negarse a realizar dicha evaluación -o firmarla en blanco- y así lo han comunicado tras asambleas de estudiantes.
Desde el gobierno escolar descartaron que el operativo se proponga como una instancia eliminatoria y aclararon que se trata de una evaluación de diagnóstico, que "sólo busca mejorar las trayectorias de aprendizaje". Sin embargo, desde el SUTE aseguran que el documento de la DGE, que llegó a los rectores, habla de que el mismo busca generar consenso para luego implementarlo como ingreso restricto.
"La prueba no es anónima, no se sabe qué van a hacer con los resultados y tampoco hubo consenso a la hora de elaborarlo ni tuvieron en cuenta nuestra realidad, si es el mismo que tomaron en el Aprender", apuntó Mariana, estudiante del Profesorado de Enseñanza Primaria.
"Las estadísticas indican que el Nivel Superior tiene un 80 por ciento de desgranamiento y uno de los porcentajes más altos de abandono se da en primer año. Una de las hipótesis es que demandamos y suponemos saberes en los ingresantes, que no tienen y eso es lo que queremos comprobar con la evaluación", dijo Emma Cunietti, coordinadora del Nivel Superior de Mendoza.
Según explicó la funcionaria, a partir de los resultados -que esperan estén listos para mitad de año-, el gobierno va a diseñar y elaborar material, espacios de debate y de apoyo para los chicos que demuestren bajos rendimientos. “Por eso es que el examen lleva nombre y apellido”, argumentó.
Más allá de la polémica, hoy unos 5.900 estudiantes de primer año de todas las carreras de Formación Docente -tanto en institutos públicos como privados- deberían realizar un examen -de dos horas aproximadamente- para responder consignas de las áreas mencionadas.
La de Mendoza será la prueba piloto de este operativo, que luego llegará a todas las carreras de formación docente del país. La implementación del operativo fue diseñada por la Secretaría de Evaluación y Calidad Educativa de Nación.
Cunietti dijo que cada instituto fijó el horario en que se lo tomará a sus alumnos, de acuerdo al cursado y la disponibilidad de espacio.
Además de lo académico, el alumno o alumna debe responder algunas preguntas relacionadas con su decisión vocacional, que ayudarán al Gobierno a promediar el perfil de los ingresantes y futuros docentes.
"Estamos en contra de un examen selectivo de ingreso. La idea del gobierno es desensibilizar y lograr consenso para dejarlo como una instancia eliminatoria, así lo expresa en el documento que llegó a los IES", expresó Ana Julia Llul del SUTE.
“En realidad, fue anunciado así, pero el gobierno dio marcha atrás el año pasado ante la organización de alumnos y docentes de los IES”, agregó la gremialista. En este sentido, desde el gremio analizan que la medida es una más que atenta contra la educación pública, como otras en el contexto de reformas que están diseñando para el nivel.
Las claves
5.900 alumnos. Desde el gobierno escolar señalan participarán estudiantes de entidades públicas y privadas y que se trata de una evaluación de diagnóstico que busca mejorar las trayectorias de aprendizaje .
Prueba con nombre y apellido. Desde la DGE explicaron que a partir de los resultados, que estarían a mitad de año, se implementarán espacios de debate y se aportará material para los estudiantes que demuestren bajo rendimiento.