Boca Juniors debutó en la edición 2017 de la Copa Argentina ante Gimnasia y Tiro de Salta en el estadio Antonio Romero de Formosa.
Y el conjunto de Guillermo Barros Schelotto cumplió con todas las expectativas de la previa. Goleó, gustó y ahora vendrá a Mendoza para medirse con Brown de Puerto Madryn, su próximo rival por los 16avos. de final.
Pero anoche, el entrenador no quiso dejar nada librado al azar. Para ello, el Mellizo puso en cancha a sus mejores valores, no sólo para avanzar a los 16os. de final del torneo sino para que los probables titulares sigan ganando con vistas al duelo con Olimpo en el torneo de Primera División, previsto para dentro de dos fines de semana.
Una de los primeros indicios que volvió a destacarse en el rendimiento xeneize fue que de a poco, el colombiano Edwin Cardona se va ensamblando al plantel campeón y el equipo va tomando forma, incluso con mayor volumen ofensivo que en la temporada pasada.
El arranque furioso del azul y oro no tuvo correlato en la red. El arquero Leguiza contuvo una y otra vez remates a Benedetto, Pavón y Pérez.
En el fondo, también se empieza a afianzar como marcador Paolo Goltz, otro de los refuerzos importantes.
Y por decantación, ya vencido una vez Leguiza, los goles fueron llegando. La diferencia de jerarquía se plasmó durante la última hora de juego y ya nada fue igual. Gimnasia y Tiro se inclinó ante el actual campeón del torneo argentino sin rebelarse.