Boca y Banfield arribaron a un entendimiento absoluto y cerraron la transferencia de Andrés Chávez, que en las próximas horas firmará su contrato con el Xeneize y será una de las incorporaciones de lujo para Carlos Bianchi, quien pidió especialmente por su contratación. De esta manera, Daniel Angelici se movió más rápido que sus pares de River y acordó la compra de un jugador solicitado en el mercado actual.
El delantero de 23 años, autor de 16 goles en la campaña que decretó el regreso a la Primera División del Taladro, firmará su contrato con el elenco de La Ribera para pelear el puesto con Emmanuel Gigliotti y Juan Manuel Martínez, a priori los titulares en la consideración del Virrey para la triple competencia del semestre. A pesar de su capacidad goleadora, también cuenta con habilidad para desenvolverse por los costados de la faz ofensiva.
Aunque Chávez era un jugador clave para el equipo de Matías Almeyda, Boca puso sobre la mesa 2.200.000 dólares por la mitad del pase y convenció a sus pares “banfileños”. Debido a que Darío Cvitanich no logró una salida del fútbol francés, el “Toro” se transformó en la prioridad para el puesto.
El joven proyecto, dueño de una potencia envidiable, se sumará a los trabajos en el corto plazo y así empezará la etapa más importante de su carrera profesional. Más allá de esa nueva incorporación, Bianchi sigue esperando que la dirigencia de Boca pueda hacerse con el pase de César Meli de Colón, también pretendido por Independiente de Avellaneda.
La práctica de fútbol
El arquero Agustín Orion y el mediocampista Fernando Gago, recién regresados del Mundial, formaron parte del once titular en una práctica, con vistas al juego de mañana ante Nacional, en Montevideo.
El ejercicio dispuesto por el DT Carlos Bianchi, a puertas cerradas, ante una formación de reserva y juveniles, se prolongó por cincuenta minutos y estuvo signado por los cambios posicionales.
En un principio, la alineación se fue la siguiente: Orion; Grana, Magallán, Forlín, Insúa; Gago, Erbes, Carrizo; Castellani; Calleri y Gigliotti.
Es decir que se mantuvo en clásico esquema 4-3-1-2, con Castellani en la plaza de volante de enganche, la que era propiedad exclusiva del ahora desvinculado Juan Román Riquelme.
Transcurridos unos veinte minutos, Bianchi movió las piezas: se pasó al sistema 4-4-2, con Castellani como volante sobre la derecha, como en Godoy Cruz, el tándem Gago-Erbes como doble cinco y Carrizo sobre la izquierda, su posición habitual en Rosario Central.
Además de los once presuntos titulares, la nómina de 18 designados ayer para viajar son Tripodi, Marín, Pérez, Bravo, Cristaldo, Palacios y Dalla Costa.
Colazo y Martínez, ambos afectados por sendas periostitis, realizaron ejercicios diferenciados, mientras que Burdisso, Ledesma, Acosta y Bravo, recuperados, ya trabajan de forma normal.
Boca volverá a entrenarse hoy por la mañana, luego de lo cual los componentes de la delegación almorzarán, antes del viaje hacia Uruguay pautado para las 15.
Castellani: el nuevo enganche
Carlos Bianchi comenzó a delinear su nuevo equipo, ya sin Juan Román Riquelme, y ensayó ayer con Gonzalo Castellani en esa posición.
Castellani, de características similares a las del último gran ídolo de Boca, cumplirá 27 años el próximo 10 de agosto. Se inició en Ferro Carril Oeste, en la temporada 2005-06 de la Primera B Nacional.
En 2010 pasó al equipo B de Villarreal, de España. Después de un semestre inactivo, como consecuencia de un conflicto con el cupo de extranjeros debutó en enero de 2011 como titular en la derrota contra Recreativo de Huelva por 2-0, y a fin de año hizo su presentación oficial en la Liga, ante Osasuna.
Suele jugar por la derecha del mediocampo, aunque las necesidades del Tomba lo llevaron a “mudarse” al sector izquierdo, donde se destacó en su rol de enganche. Tiene una muy buena pegada de media distancia y también se le elogia su elegancia y su precisión en los pases, gracias a su visión de juego.