Tras su concierto de anoche en Córdoba al cierre de la presente edición, la agrupación británica Blur concluirá su visita a nuestro país hoy desde las 21 con un show en Buenos Aires. El mismo se llevará a cabo en el estadio cubierto del predio Tecnópolis, un espacio dividido en plateas, pullman y campo vip con capacidad para 12.000 personas.
El recital oficiará a su vez como cierre de una gira americana que llevó a la banda también a Estados Unidos, México y Chile, país este último donde ante más de diez mil personas repasaron el pasado miércoles tanto sus viejos éxitos como las canciones de “The Magic Whip”, el disco que lanzaron en abril de este año tras un hiato de más de una década sin entrar a estudios.
Puntales junto a Oasis y Pulp del movimiento conocido como Britpop y surgido en los años noventa, la banda compuesta por Damon Albarn, Graham Coxon, Alex James y Dave Rowntree cambió en aquella época el panorama de la música popular con canciones arraigadas en una tradición inglesa que tomó tanto de los Beatles y los Kinks como de bandas postpunk de los ochenta como XTC o Madness.
Su explosión llegó en 1994 con el disco Parklife, se consolidó un año más tarde con The Great Escape a través de hits como “The Universal” o “Country House” y terminó de hacerse conocida en todo el mundo en 1997 con un disco homónimo que incluía “Song 2”, una de esas canciones que en su momento sonaron tanto en las radios como en videojuegos y publicidades de TV.
Luego de varias peleas entre Albarn y Coxon, la banda se separó en 2003. Albarn entonces se dedicó a Gorillaz, un proyecto paralelo donde camuflado a través de una banda virtual con personajes animados logró un éxito de ventas que incluso superó la repercusión que hasta entonces había tenido Blur.
Además realizó bandas de sonido para películas y formó una superbanda con miembros de The Clash, The Verve y Fela Kuti. Finalmente el año pasado grabó un disco solista, “Everyday Robots”, que lo trajo a nuestro país también en octubre del año pasado, donde brindó un inolvidable show en el Gran Rex.
El resto de los miembros de la banda siguió un camino diferente durante la separación. Rowntree y James se dedicaron a proyectos personales alejados de la música, mientras que Coxon grabó en sellos independientes una serie de discos de bajo perfil donde exploró una psicodelia garagera inspirada entre otros en sus admirados músicos de culto Syd Barrett y Robyn Hitchcock.
En 2008 la banda limó asperezas y volvió con un megaconcierto gratuito en el Hyde Park de Londres.
Entusiasmados con la repercusión, comenzaron a brindar shows en todo el mundo y arribaron en nuestro país en 2013, para finalmente lanzar de manera sorpresiva este año un nuevo trabajo discográfico que les permitió salir de la repetición de viejos temas y aggiornar su sonido explorando nuevas formas de la canción a través de logradas piezas como “Lonesome Street”, “Go out” o “There are too many of us”, con las cuales lograron un sonido renovado sin alejarse demasiado de la esencia que los llevó a la popularidad en los noventa.
Esta noche, entonces, los seguidores de la banda podrán apreciar la vigencia de una carismática banda que supo hacer época en su momento y que aún hoy, a través de canciones enraizadas en la mejor tradición inglesa pero orientadas siempre a lo nuevo, sigue manteniéndose fresca y renovada.