El aún presidente de la FIFA, el suizo Joseph Blatter insistió en que no es un corrupto, en momentos en los que la organización está siendo investigadas por presuntas irregularidades, en una entrevista a la revista alemana Bunte.
Preguntado por la situación, el dirigente de 79 años contestó: "Cualquiera que me acuse de corrupto lo primero que tiene que hacer es demostrarlo".
"Nadie podrá hacerlo porque no soy un corrupto", insistió Blatter.
Blatter, presidente de la FIFA desde 1998, anunció el 2 de junio que presentaba su dimisión solo cuatro días después de ser reelegido para un quinto mandato, aunque seguirá en el puesto hasta que tengan lugar unas nuevas elecciones a finales de 2015 o principios de 2016.
Esta decisión fue consecuencia de los dos investigaciones que están llevando contra la FIFA las justicias de Estados Unidos y Suiza por corrupción.
La justicia norteamericana imputa a 14 miembros o exmiembros de la FIFA y personas relacionadas con el organismo de haber cobrado millones de dólares en sobornos en las últimas décadas.
Paralelamente, la justicia suiza investiga los procesos de elección de Rusia y Catar como sedes de los Mundiales de 2018 y 2022.
Días después de su anunciada dimisión, Blatter creo confusión al asegurar que solo había puesto su cargo a disposición de la asamblea de la FIFA, en la que cuenta con el apoyo de las federaciones africanas y asiáticas.
En la entrevista, Blatter aseguró entender las críticas, pero no las acusaciones infundadas. "Acepto la crítica constructiva, pero alguien que dice que Blatter es corrupto porque la FIFA es corrupta, no puedo más que negarlo".
"Aquel que dice algo así sin pruebas debería ir a prisión", añadió.