“Tenemos la certeza de que los resultados finales que se conocerán este lunes van a ser muy distintos de los parciales que se estuvieron vendiendo este domingo”, aseguraron los precandidatos Adolfo Bermejo y Diego Martínez Palau, para quienes el Frente para la Victoria quedará “muy cerca” de Cambia Mendoza.
Y lo argumentaron en que “el recuento se inició por los departamentos de Capital, Godoy Cruz y San Carlos -adversos para el FpV- ya que el escrutinio finalizó antes porque las boletas no llevaban precandidaturas a intendentes ni concejales”. E inmediatamente agregaron que “a medida que el recuento avance y se carguen los departamentos de conducción peronista crecerá el porcentaje del FpV y decrecerá el de Cambia Mendoza”.
“Cornejo, con su conglomerado de partidos, logrará menos votos de los que logró (Julio) Cobos solo en la PASO de 2013”, se animó a adelantar el gobernador, Francisco Pérez, en el búnker de Bermejo. Cobos logró un 45 por ciento de los votos en 2013. “Si dos precandidatos presidenciales como (Mauricio) Macri y (Sergio) Massa no vinieron a festejar como se había anunciado, por algo es”, dejó caer.
El amplio búnker de Bermejo-Martínez Palau -en un hotel de calle Federico Moreno- registró dos momentos de festejo. En ambos se celebraron más los números (estimados) del Frente para la Victoria que los propios de su agrupación frente a las otras dos líneas del FpV.
El senador nacional y el ministro de Transportes fueron los primeros en enfrentar a la prensa a las 20.15 y -sin dar cifras concretas- dieron a conocer resultados de boca de urna que acercaban al FpV a lo que definieron como “un empate técnico” con la fórmula de Cambia Mendoza.
El segundo momento de festejo -con marchita incluida- se registró a las 23.30, cuando los integrantes de la fórmula volvieron a hablar: “Vamos a estar muy cerca de la Alianza Cambia Mendoza”. Y los encargados de prensa del FpV difundieron números no oficiales que (hacia la medianoche) le atribuían una distancia menor con lo que indicaban las cifras oficiales.
“Ahora vamos a formar un frente con otros dos compañeros que son peronistas”, enfatizó Palau, con referencia al diputado nacional Guillermo Carmona y al ex ministro Matías Roby.
El prometido abrazo de los tres precandidatos del FpV no se produjo ayer hasta la medianoche (todavía con un escrutinio en pleno desarrollo) y el compromiso de que “el que gana gobierna y el que pierde acompaña” se postergó para esta semana.
Si bien ni Roby ni Carmona se acercaron por el búnker de Bermejo, trascendió que los colaboradores de la fórmula Roby-Pringles -encabezados por el senador José Scoda- iniciaron anoche mismo las primeras conversaciones, aunque con condicionamientos.
En tanto, entre Bermejo y Carmona no existieron llamadas telefónicas ni visitas. “Seguramente nos vamos a comunicar esta semana”, dijo el senador nacional con esperanza.
La confluencia entre las dos principales líneas internas del Frente para la Victoria -identificadas con el pejotismo y el kirchnerismo- incluye una dura negociación por los precandidatos a legisladores nacionales. Es que la Casa Rosada tiene intenciones de definirlos mientras el gobernador Pérez y el intendente de Las Heras, Rubén Miranda, aspiran a encabezar las nóminas de diputados y senadores.
Por lo tanto, las partes no se sentarán a negociar hasta que no se cuente el último voto.
“Todo el peronismo va a estar unido y vamos por otros votos”, manifestó Bermejo. “Hemos dado un ejemplo de convivencia interna y ahora vamos por otro gobernador peronista”, se ilusionó en medio de una estridente “marchita” peronista, entonada por medio millar de militantes.
“Hicimos un buen uso de las PASO y hemos elegido los candidatos democráticamente, a diferencia de la Alianza Cambia Mendoza que -sin respetar las PASO- digitó una fórmula no democrática”, disparó Martínez Palau.
Y ambos cuestionaron al candidato opositor, Alfredo Cornejo, quien habló de “empezar a negociar la transición porque ha cambiado la relación de fuerzas”.
“Autoatribuirse un triunfo sin que haya finalizado el recuento de votos y hablar de ‘cogobierno’ son declaraciones poco prudentes y le faltan el respeto a nuestro gobernador, que va a dirigir la Provincia hasta el último día de su gestión, para entregarle el mando a otro gobierno peronista”, enfatizaron.
