En Luján de Cuyo, al sur del Primer Barrio 13 de Diciembre, a la altura de la avenida Guevara, siempre hubo amplios descampados, resabio de antiguos fincas de uva y montes frutales.
Pero, de un tiempo a esta parte en ese sector, casi pegado a la antigua calle Lamadrid (o de La Costa) y a la vista del río Mendoza, se han construido casas individuales y pequeños barrios, que van cambiando la fisonomía del sector.
Una de esas radicaciones se gestó al sur de la avenida Sáenz Peña, con el nombre de Balcón del Río, en clara referencia a las cercanías con el principal curso de agua de la zona norte.
Son 28 viviendas en dúplex que han permitido que familias jóvenes accedieran a su primer hogar, recibiendo las llaves en febrero pasado. Es decir, que prácticamente las están entrenando.
Se trata de matrimonios con edades comprendidas entre los 30 y 45, que hasta hace poco alquilaban o vivían con familiares, como describió Mónica Denaro (43, maestra en una escuela de Agrelo).
La construcción estuvo a cargo de la empresa Portillo, Sabatino y Balacco SRL, que levantó casas de 2 plantas, con posibilidad de ampliación. Todo el proyecto está resuelto en 65 m2, con disponibilidad de un pequeño patio trasero, pero sin cocheras.
Ubicado a la altura de Lamadrid al 700, el Balcón del Río está urbanizado y cuenta con instalaciones eléctricas subterráneas y cunetas tapadas por lajas y rejas, aunque las 3 pequeñas calles del conglomerado no están asfaltadas y presentan una capa de estabilizado compactado y un colchón de ripio, tipo granza, como terminación superficial.
Por eso los moradores tramitan su pavimentación, dado que la extensión es muy corta y aparentemente sería un trabajo sencillo. Esas arterias no interrumpen la trama urbana del área, por lo que los adjudicatarios tienen la idea de cerrar los ingresos, pero permitiendo la entrada a las personas y sin colocar garitas o guardias.
Una de esas reducidas vías de comunicación se llama Pedro Ghilardi, en referencia a un antiguo habitante del lugar, ya fallecido, quien era dueño de las parcelas del área. Le suceden los integrantes de la tercera y cuarta generación.
La operatoria para levantar estos dúplex nació hace 11 años, cuando los actuales propietarios de vincularon con la cooperativa "El Hogar del Trabajador", que preside el agrimensor Roberto Ceschín, entidad con amplia trayectoria en materia de vivienda por haber construido por lo menos 14 barrios, siendo el primero el denominado La Picada I, en el camino a Tupungato, a la salida de Ugarteche.
Ceschín reconoció que hasta que se formalizaron los créditos, los socios de la pequeña barriada tuvieron que esperar casi una década para ver materializados sus deseos. Además, influyó la ocurrencia de un aluvión en el sur de Luján en 2005 y el sismo de agosto de 2006, que pusieron las prioridades en materia de techo al servicio de damnificados por esos fenómenos.
El conglomerado se realizó por gestión del IPV, con el financiamiento del Plan Federal Fideicomiso Financiero, II Etapa.
El proyecto se iba a formalizar por la ley de la Propiedad Horizontal -que dictamina que los pasillos son propiedad de los consorcistas-, pero la situación se revirtió y se pudo aplicar la Ley de Loteos N° 4341, y de esa manera cada propietario tiene escritura individual. Tanto la cooperativa como los particulares reconocieron que hubo un apoyo positivo por parte de la Dirección de Vivienda de la Municipalidad de Luján de Cuyo.
Solidaridad
En la ejecución de este hábitat se produjo un ponderable gesto de solidaridad por las familias adjudicataria y la entidad intermedia, ya que fue donado sin cargo uno de los lotes a la ONG Fundación María del Carmen, que preside Silvia Bidaux, profesora de educación física y docente de la escuela Romelio Villalobos, con Elena Robles (64), como vicepresidenta.
La entidad, con 14 años de antigüedad, está dedicada a integrar socialmente a las personas con discapacidad (niños, jóvenes y adultos).
La organización altruista dispone de un edificio muy completo, de 125 m2 cubiertos, con dependencias acordes a las demandas de sus ocupantes, donde en breve se abrirán talleres educativos e inclusivos de pintura, danza folklórica, recreación, deporte, cocina y panadería.
La planta baja cuenta con un hall de ingreso, un consultorio, una cocina tipo industrial, un pequeño salón conectado a la cocina, un baño con dimensiones y artefactos para discapacitados, y un patio con lavadero. En el piso superior se ha diseñado un generoso salón de usos múltiples, un depósito y un baño de grandes dimensiones.
"Queremos que nuestros alumnos aprendan el oficio gastronómico como una salida laboral y para que ayuden en sus hogares", puntualizó Silvia. Pero, la intención de las dependencias está un poco condicionada porque todavía no se ha podido conectar el gas al inmueble.
La presidenta contó que la institución está desarrollando un una iniciativa, que consistirá en tratar de evitar la discapacidad mental por causas socioculturales (desnutrición, abandono, desamor y exclusión).
Para concretar la obra general se canalizó una importante hijuela, que pasa por el límite norte del terreno, pero la unión vecinal en formación y que encabeza Sergio Bravo (41, técnico electromecánico), quiere cerrar el tramo que pasa por el barrio para resguardar a la numerosa población infantil del lugar.
Además de la vecindad con la histórica calle del Bajo, el complejo habitacional está pegado al barriecito Lamadrid y a corta distancia de un barrio grande, como es el Primer 13 de Diciembre. Hacia el oeste se encuentra el club Peumayén, y hacia el este, el legendario y querido Luján Sport Club.
Asfalto y servicios
Pese a las reducidas dimensiones del Balcón del Río, sus habitantes tienen varias metas, que esperan conseguir a través de la gestión de la vecinal.
Ya se hablado del asfalto de las arterias y del cercado perimetral del terreno. También se tramita la recolección de residuos, ya que por ahora ese servicio no se dispone y la basura domiciliaria es depositada en las calles Lamadrid o Guevara, por donde pasan los camiones municipales.
Otra carencia momentánea es la falta de iluminación pública, a pesar de que están colocadas las luminarias, pero falta la correspondiente conexión eléctrica.