Policías que patrullaban por el interior del barrio Campo Papa en Godoy Cruz detuvieron a un joven de 27 años al que le secuestraron más de 200 dosis de marihuana y casi 90 de cocaína mientras los vecinos les arrojaban piedras. El detenido tenía un revólver en su poder.
Eran las 17.30 de hoy cuando los uniformados observaron a un joven en actitud sospechosa en una plazoleta del Campo Papa. Escucharon silbidos y gritos que alertaban sobre sus presencia en el área por lo que decidieron ingresar rápidamente a pie ya que los móviles no podían transitar por la zona.
Mientras los choferes cuidaban las patrullas con escopetas, observaron a tres sujetos, uno de ellos con una mochila y un morral. El joven se tomaba de la cintura y extrajo lo que parecía un arma de puño.
Pese a recibir la voz de alto, el escurridizo sospechoso continuó huyendo y se ocultó en un “rancho abandonado”, según describieron fuentes policiales.
En el interior de la tapera los efectivos lograron reducirlo, pese a la férrea resistencia que ofrecía el muchacho. En su ropa había ocultado una pistola calibre 9 mm, que fue secuestrada.
En el bolso y el morral había 210 bolsitas con marihuana, 87 envoltorios de papel glasé con cocaína, una balanza eléctrica, una picadora eléctrica, bolsas y un cuchillo de grandes dimensiones, detallaron desde el Ministerio de Seguridad provincial.
Como algunos vecinos arrojaban piedras a los uniformados, debieron retirarse del lugar con el detenido, quien fue identificado como Jonathan Pino. Tras la agresión el móvil 2932 sufrió daños en el parabrisas, producto de un piedrazo.