Los proyectos deportivos serios y profesionales, tarde o temprano, tienen sus frutos. Las claves: entrenar, paciencia y sacrificio. Así se podría definir el presente del básquetbol femenino de Andes Talleres Sport Club. La institución Azulgrana acaba de ganar su tercer título en forma consecutiva. Pero este certamen, tiene un plus. Y es que fue en forma invicta. Disputó 16 juegos y en todos cantó victoria.
Sin dudas, cortó las redes el mejor equipo de todos. En los últimos años, el conjunto Azulgrana se convirtió en un verdadero semillero de talentos. Es imposible no sorprenderse con la cantidad de niñas que practican esta disciplina los días martes y jueves en la institución. Parece un hormiguero.
Mucho tiene que ver esa “magia” que tiene y contagia, María José Rodríguez, capitana y líder de este plantel tricampeón. Es que la “Jose” es la encargada de las divisiones menores del club junto a Daniela Sencion.
Esa etapa del básquet es fundamental, ya que se aprenden los fundamentos básicos del juego: lanzamiento, pique, pase y defensa. Y ahí está María José Rodríguez abrazada a Eugenia Sandoval y Flavia Sidoli dando la vuelta olímpica, hoy compañeras.
Ayer, alumnas y profesora. Este equipo imbatible que construyó Israel Alvaro, tiene una mezcla de jerarquía, experiencia y juventud. Sobra talentos.
Es un equipo largo, con variantes tantos en ataque y defensa y termina desgastando a cualquier rival. En la final lo sufrió Banco Mendoza. Andes Talleres, cortó las redes y gritó ¡tricampeón!