La búsqueda de la avioneta perdida hace 11 días tras despegar del aeródromo de San Fernando continuó hoy con la utilización de drones equipados con sensores infrarrojos, mientras el dueño de la aeronave dijo que confía en que su hijo y los dos pilotos que iban a bordo estén vivos.
Ignacio Aristi, propietario también de la bodega mendocina Melipal, dijo que no descarta que el avión Mitsubishi matrícula LV MCV haya sufrido un accidente y pidió a las autoridades que sigan buscando a su hijo Matías, único pasajero, y a los pilotos Matías Ronzano y Facundo Vega.
"Nosotros creemos que están vivos", sostuvo el dueño de la aeronave desaparecida el 24 de julio, y agregó: "No tenemos nada, ningún indicio".
"No nos vamos a resignar a nada, nosotros ni los que nos acompañan", afirmó el empresario agropecuario de Bragado en declaraciones al canal TN.
Aristi afirmó que la familia no recibió pedidos de rescate ni amenazas, y dijo que en este momento se sostienen con "el apoyo de la gente".
El hombre agradeció la solidaridad y apoyo de los vecinos de Bragado y de los amigos que colaboran con la búsqueda de la avioneta propiedad de la empresa agropecuaria Aibal S.A.
"No nos vamos a resignar a nada, nosotros ni los que nos acompañan"
"Creo que mi hijo tiene mucha fuerza y lo ponemos como ejemplo cuando nos quebramos", dijo el empresario con la voz entrecortada.
En tanto, la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) aseguró hoy que prosigue por tierra, agua y aire la búsqueda de la avioneta perdida, aunque sin resultado positivo.
Asimismo, informó que se intensificaron los rastrillajes mediante la utilización de drones equipados con sensores térmicos e infrarrojos.
Según detalló, desde el comienzo de las actividades del Centro de Operaciones de Búsqueda se recorrieron en vuelos de rastrillaje más de 240.000km2, lo que representan más de 350 horas de vuelo.
La búsqueda por tierra se realizó con más de 230 efectivos de la Prefectura Naval Argentina, y más de 30 efectivos de la Gendarmeria y, además, participaron 8 helicópteros, 5 aviones de distintas fuerzas, 52 aeronaves civiles y 9 drones.
Respecto de las búsquedas por agua se llevan navegados más de 16.000 Km2, tres embarcaciones de la Armada Argentina, 47 embarcaciones de la Prefectura Naval Argentina, 3 embarcaciones civiles para el traslado de personal, ademas de dos de la Armada Uruguaya para buscar en las costas del río Uruguay.
Por su parte, trabajadores de organismos de aviación nucleados en ATE expresaron su rechazo a las declaraciones de funcionarios que pusieron en duda el accionar de los controladores aéreos en la primera etapa de la búsqueda de la avioneta perdida.
"Desde ATE queremos desligar de toda responsabilidad a los trabajadores de la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA) de los aeropuertos de San Fernando y de Aeroparque, y señalar como absolutos responsables a los directivos de ANAC y de EANA S.E., quienes comparten compromiso ante la ley en las diferentes etapas de búsqueda y salvamento que sean requeridas por las aeronaves que operan en el territorio nacional", sostuvo en un comunicado.
El avión turbohélice bimotor matrícula LV MCV salió el 24 de julio a las 14.30 del aeródromo de San Fernando con un plan de vuelo por el que estimaba llegar a las 18.30 a la terminal aérea de la localidad formoseña de Las Lomitas.
Seis minutos después de haber despegado y tras recorrer apenas 17 kilómetros, la avioneta desapareció de los radares del aeródromo de San Fernando y los aeropuertos Jorge Newbery y Ezeiza, y desde entonces no hubo más indicios de su rumbo.