La pasión por los autos y motos antiguas, el amor por los “fierros” se lleva en la sangre y se hereda, tal como lo demuestra la exposición llevada adelante por el Club Vintage San Rafael, donde se pueden observar y admirar vehículos y motos de distintas épocas en excelente estado.
El Museo del Club Vintage funciona en la calle Sarmiento y Blas Parera -en la ciudad de San Rafael- en las instalaciones de la concesionaria Amsat, que prestaron el espacio para concretar este sueño de mostrar esos autos en los que trabajan en la restauración. Permanecerá abierto hasta el 31 de enero, y se puede visitar de 20 a 22.
“Todos estas máquinas que están aquí llegaron por sus propios medios, porque funcionan a la perfección”, contó a Los Andes, José Antonio Spinello, integrante del Club, restaurador y propietario de varias motos en exposición.
El amplio salón cedido por Anuar Sat (hijo), presidente de la entidad, queda chico a la gran cantidad de autos y motos clásicos y antiguos que son parte del club. Por eso, cada uno eligió qué vehículo mostrar para dar lugar a que todos pudieran exponer a sus “mimados”.
Así, hay vehículos de vieja data como un Ford T camión de 1923, en funcionamiento y en estado de restauración, por lo que todavía le falta terminar trabajos de chapería, carrocería, y algunos detalles más.
“Coleccionamos autos antiguos restaurados y sin restaurar. Muchos fueron pasando de generación en generación, otros los hemos ido comprando o buscando con el paso de los años”, dijo Spinello. Allí se exhibe una camioneta Ford A de 1928 “que pertenece a la misma familia desde que fue comprada 0 km; la manejó el abuelo, luego el hijo, ahora está en poder del nieto y suele andar el bisnieto”, aseveró.
También forman parte de la muestra muchos vehículos que son “hot rod”, es decir que se trata de autos antiguos modificados con motores y mecánica moderna.
El Club Vintage nació en 2012 por iniciativa de varios dueños de vehículos antiguos que se unieron para participar de rallys, mostrar sus autos y motos, como también llevar adelante movidas solidarias. A falta de un lugar donde juntarse decidieron hacerlo el primer domingo de cada mes, en el predio de la vieja estación del ferrocarril, en San Rafael ubicada en San Martín y Zapata.
El intercambiar información, charlar sobre cómo restauraron sus vehículos, dónde los consiguieron y otras tantas cosas que los unen, los llevó a consolidarse como un club -actualmente por conformarse de manera formal- y comenzar a hacer diversas acciones como festivales internacionales de motos, de carrera de velocidad de época con la participación de pilotos de los años ‘50, ‘60 y ‘70, y otros encuentros similares con fines solidarios.
Unos 30 integrantes forman el club, varios poseen más de un vehículo, por lo que para armar el museo debían escoger cuál auto exhibir. Entre los autos con historia de esta muestra se encuentra el Ford A del año 1931 que perteneció a Higinio Raffaeli, pionero en los helados artesanales en el departamento.
Las motos y ciclomotores antiguos también se llevan la atención de los visitantes del museo. Entre ellas hay varias Puma, de fabricación nacional, algunas motos de marcas inglesas como una Norton Modelo 18 de 1947, y Panther, incluso con sidecar que fue adaptado para conducir sobre la izquierda.
Además de motos alemanas como algunas de la marca BMW y ciclomotores antiguos Innocenti 48 cc y varias Siambretas, entre ellas una 125 LD de 1961 con sidecar.
Para todos los gustos
Abierto al público todos los días de 20 a 22, pensado para que los turistas puedan visitarlo al regresar de los paseos, entre los autos expuestos en el Museo del Club Vintage hay varios que llaman la atención de grandes y chicos, que aprovechan para fotografiarse junto a ellos. Como un Ford A cupé, con el asiento fuera de la cabina que llamaban “mata suegra” y que actualmente una familia local suele alquilarlo para llevar a los novios a la iglesia.
Un Ford de 1923 con manivela en perfecto estado es otro de los grandes atractivos de la muestra, como también una pick up Ford A de 1928, un Ford T Truck de 1923 o un BMW De Carlo 700 de 1962, un VW Karmann Ghia y varios hot rod como un Chevrolet 37 entre otros.
Además de poder ver la muestra en el lugar siempre hay integrantes del Club Vintage dispuestos a conversar y compartir su pasión por los autos y las motos.