El retraso que sufrió su coequiper, el finlandés Mikko Hirvonen, posibilitó que Orlando Terranova se erigiera como el mejor de Mini al término de la décima etapa (Chilecito-San Juan) que el Rally Dakar desarrolló ayer en Autos.
Luego de 450 kilómetros de velocidad pura, el mendocino del X-Raid Team finalizó en el quinto puesto de la especial. Quedó a 20’12’’ del galo Stephane Peterhansel, quien volvió a vencer con el Peugeot.
De esta manera, Orly se coloca en la sexta plaza del clasificador general a 1h45’21’’ del múltiple campeón del Dakar, que tiene una suma total de 24h58’43’’ con el 3008 DKR.
“Fue una etapa muy dura y técnica, típica de estos terrenos. Tuvimos problemas en uno de los puntos, pero por suerte anduvimos bien y seguimos firmes”, expresó el mejor de los pilotos argentinos.
“No será fácil avanzar otra posición en la clasificación, pero haremos todo lo posible”, puntualizó Orly que, en el vivac ubicado en el autódromo El Zonda de San Juan, fue recibido por su mujer y su hija de apenas 40 días.
Fue otro 1-2-3 de la marca francesa ya que Sebastien Loeb y Cyril Despres, escoltaron a su compatriota en la etapa. Lo mismo sucede en la general, con Loeb a 5’50’’ de Peterhansel y Despres a 25’40’’.
Alejandro Yacopini y Daniel Merlo también arribaron a la provincia vecina. Con la Toyota Hilux ocuparon la 17ª posición de la etapa y se posicionan en el 21º lugar de la general, a 7h45’54’’ del mejor.
El buen gesto de Peterhansel
Si bien Loeb llegó primero, Peterhansel fue declarado ganador por los 10 minutos que le insumió la asistencia a Simón Marcic, cuando chocaron y el motociclista esloveno abandonó por una fractura de tibia y peroné.
“Con algo así resulta difícil volver a concentrarse”, comentó.