Sobre ellos pesan graves acusaciones. Ella ya fue condenada a perpetua por asesinar a su novio. Él está está siendo juzgado por presuntamente integrar una banda narco. Pese a su vida tras la rejas, ambos se enamoraron.
Hablamos de Nahir Galarza (20), quien cumple prisión perpetua por el homicidio de su novio, ocurrido hace casi un año en Gualeguaychú y de Matías Caudana (20), un joven que está siendo juzgado por presuntamente integrar una banda narco en Paraná.
Tras el pedido de su abogado, Caudana fue autorizado por el Tribunal Oral Federal de la capital entrerriana a visitar desde hoy en el penal de mujeres a Nahir.
Las visitas podrán efectuarse "previa conformidad expresa de la mencionada (a recabarse por la Unidad Penal número 6 mediante acta de estilo) y previa constatación del cumplimiento de los requisitos establecidos en los reglamentos carcelarios", especifica el oficio firmado por el presidente del TOF, Roberto López Arango, .
Lafferriere aseguró que su cliente, alojado en la cárcel de varones situada enfrente, le manifestó que con Nahir son "amigos y quieren charlar, pero no tener visitas íntimas" por el momento y que la conoció cuando fue a visitar a su abuela paterna, que también está presa en la misma cárcel.
"Está todo hablado con ella, está todo bien, a ella ya le informaron y aceptó. Mañana (por hoy) arrancan las visitas y dice que si lo absuelven, la quiere visitar igual", aseguró el letrado.
El joven fue detenido hace dos años junto a su padre y una vez que también cayó presa su abuela, pidieron autorización para hacerle visitas intercarcelarias dos veces por semana, ocasión en la conoció a Galarza.
En los alegatos del juicio que se le sigue a la banda de Caudana padre, el viernes pasado Lafferiere pidió la absolución de su cliente o una pena mínima y en uno de los últimos puntos de su petición, reclamó que se habilitara las visitas con Nahir, lo cual sorprendió a los presentes.
Nahir se convirtió este año en la mujer más joven en ser condenada a prisión perpetua en la historia criminal argentina, al ser encontrada responsable del homicidio de Fernando Pastorizzo (20), a quien mató de dos tiros en la madrugada del 29 de diciembre de 2017 en Gualeguaychú.
La joven primero dijo que había visto por última vez a su novio la noche anterior, pero luego se fueron sumando pruebas, entre ellas un video que la mostraba caminando cerca de la escena del crimen, que derivaron en que la chica terminara presentándose a la Justicia y confesara el hecho.
Luego fue cambiando su versión para que el crimen quedara como "accidental" y sostuvo que había mentido porque temió que culparan a su padre policía, que era el responsable de la pistola calibre 9 milímetros reglamentaria que se convirtió en el arma homicida.
En julio, fue condenada por "homicidio calificado por la relación de pareja" y la sentencia fue apelada por la defensa y siendo revisada por la Cámara de Casación de Concordia.