Laurent Barria, el Director de Marketing Global de Citroën aseguró que están trabajando en el Concept-car, un auto eléctrico que busca tener el chasis de cartón y de ese modo poder lograr mayor velocidad y hacerlo más ecológico.
El auto tiene un nombre francés que deriva de una pronunciación en inglés, pero eso es anecdótico, contó Barria en una entrevista con Infobae desde Brasil, donde llegó con la marca francesa para presentar el nuevo Citroën C3. Allí contó que el nuevo vehículo se llama Citroën Oli, que intenta escribir la fonética de “All E”, es decir “todo eléctrico”.
Pero al momento de verlo, lo que menos llama la atención es su nombre, ya que entre sus formas y parte de los materiales que se usaron para construirlo, hay mucho terreno para abordar.
El Oli es un auto mucho más voluminoso que el Ami, y sin embargo solo pesa el doble y tiene capacidad para cinco pasajeros. Es decir que es mucho más grande en comparación con el pequeño biplaza que nació en 2020 que está concebido con el mismo tipo de idea: hacer un auto eléctrico accesible, eficiente y sencillo, que sin embargo no pierda la personalidad que debe tener.
El objetivo de Citroën, según explica Infobae, es lograr todo eso junto y hacer un auto que tenga mayor autonomía porque consume menos y no porque tenga baterías más pesada y más tecnología. Así, el Oli utiliza para el capot, el techo y los paneles de la eventual caja trasera, superficies planas construidas con un material creado por Basf, que está compuesto por cartón corrugado reciclado con una estructura de tipo sándwich en nido de abeja entre paneles de refuerzo de fibra de vidrio.
Dichos paneles están revestidos con resina de poliuretano y cubiertos con una capa protectora texturizada como la que se suele utilizar en el suelo de los estacionamientos y en las rampas de carga. Además, son muy rígidos, livianos y resistentes como para permitir que un adulto pueda pararse sobre su superficie. La clave está en que su peso equivale a la mitad de lo que pesan los de acero convencional.
Pero sin dudas, la otra cualidad que distingue al auto es su diseño, pero no se puede aislar un tema del otro. En principio, porque ese material tan liviano y resistente requiere que se aplique en superficies planas, y el segundo es que el auto está concebido para ser eficiente en todos los aspectos posibles.
En cuanto a su interior, no tiene pantallas y los asientos están construidos con materiales reciclados, entre los que destacan formas exteriores también tienen con una explicación.
En cuanto al parabrisas es completamente vertical y esto se debe a que así, la distancia entre la parte superior y la inferior es más corta y por lo tanto insume una menor cantidad de vidrio. Además de reducir el peso y la complejidad de la forma de los parabrisas convencionales, su menor tamaño permite que sea menos costoso de producir.
En cuanto a la mecánica, es 100% eléctrica y sólo necesita una batería de 40 kWh para ofrecer una autonomía de 400 km. Al limitar la velocidad máxima a 110 km/h para maximizar la eficiencia, el consumo es de apenas 10 kWh/100 km, y la carga del 20% al 80% se puede hacer en 23 minutos.
El Oli pesa solo 1.000 kg, mide 4,20 metros de largo, 1,65 metros de alto y 1,90 metros de ancho. Se trata de un auto sencillo, estético, agradable y sustentable. Y ese es el secreto que quiere acentuar Citroën con este modo de pensar los autos del futuro.
