El jefe de Finanzas del Vaticano, el cardenal George Pell, acusado por abusos sexuales en Australia, compareció este miércoles ante un tribunal de Melbourne y su abogado dijo que se declarará inocente.
El estrecho colaborador del Papa Francisco adelantó a través de su abogado Robert Richter que se dispone a declararse inocente de los cargos que pesan en su contra. “El cardenal se declarará no culpable de todos los cargos”, dijo el letrado.
La policía australiana acusa a Pell de delitos de abuso sexual, sin dar más detalles sobre las acusaciones, explicando la necesidad de preservar la integridad del proceso judicial. Trascendió sin embargo que hay “múltiples denunciantes”.
Con aspecto sombrío y débil, el prelado de 76 años asistió a la audiencia junto a su abogado, que de momento no formalizó la declaración de inocencia ya que se trataba de una etapa administrativa preliminar al juicio propiamente dicho.
“La idea misma de abusos sexuales me parece detestable”, había declarado el mes pasado el cardenal en el Vaticano.
Pell, número tres de la Iglesia católica y prefecto de la secretaría de Asuntos Económicos, es el eclesiástico de mayor rango acusado hasta ahora de abusos sexuales.
El Vaticano hasta el momento ha reafirmado su respaldo al cardenal, destacando el respeto del papa Francisco por su “honestidad” y su “enérgica dedicación” a las finanzas de la Santa Sede.