La Justicia intentó acercar las partes en esta conflictiva situación, aunque no logró resultados fructíferos. Fue la fiscal de la departamental Las Heras-Lavalle, Gabriela Chávez, quien, al notar la creciente tensión entre los trabajadores y la comuna, convocó en la tarde de ayer a una "audiencia de conciliación", tal como indica el Código Procesal Penal (art. 5).
"No hubo posibilidad de acuerdo", se lamentó Chávez sobre la reunión en la que participaron las principales figuras de ATE, representantes de la Subsecretaría de Trabajo y el secretario de Obras lavallino, Rolando Romero.
Righi se excusó de ir porque debía "trabajar en asuntos municipales", mientras que los gremialistas cuestionaron su ausencia. "No quiere dar la cara", lanzó Roberto Macho, de ATE.