Atlético Nacional de Colombia llegó ayer a Japón para disputar el Mundial de Clubes, todavía afectado por el reciente accidente aéreo que provocó la cancelación de la final de la Copa Sudamericana.
Nacional iba a jugar la final contra Chapecoense, pero el avión en el que viajaba el club brasileño se estrelló el 28 de noviembre a las afueras de Medellín, un accidente en el que murió la mayoría del plantel y cuerpo técnico.
Nacional se clasificó al Mundial de Clubes al ganar la Copa Libertadores en julio, y el plantel prometió honrar la memoria de Chapecoense cuando debute en el campeonato el miércoles en semifinales frente a Kashima Antlers de Japón, que venció a Mamelodi Sundowns de Sudáfrica.
``El mejor tributo que podemos darles es jugar un gran torneo y alcanzar la final'', dijo el técnico de Nacional, Reinaldo Rueda, en el aeropuerto de Osaka.
La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) accedió a un pedido de Nacional y otorgó a Chapecoense el título de la Sudamericana.
Nacional espera avanzar a la final del Mundial de Clubes que se jugará el 18 de diciembre, en la que podría toparse con Real Madrid.
``Sabemos la responsabilidad que tenemos para con Sudamérica'', dijo el capitán de Nacional, Alexis Henríquez. ``Pueden estar seguros que haremos todo lo posible por ganar el Mundial de Clubes''.