Nuevo capítulo en el caso que conmocionó a España y al mundo. Se esclarecen nuevos detalles sobre la historia en la que una mujer le pidió un favor a su amiga y le entregó una caja que supuestamente contenía juguetes sexuales, pero que en realidad tenía una desagradable situación: la cabeza de su pareja que había desaparecido en abril.
Investigadores revelaron que María del Carmen Merino Gómez, de 61 años, lo habría cocinado antes de envolverlo en papel de aluminio para evitar el mal olor cuando se terminara de descomponer la cabeza.
La detenida en la ciudad de Castro Urdiales sostuvo que era la cabeza de su pareja, Jesús María Baranda, del que no se sabía nada desde abril, y aseguró que alguien la había dejado en la puerta de su casa.
"La guardé porque era el único recuerdo que tenía de él", se justificó. Sin embargo, no reveló por qué le dio la caja a una vecina.
Además, señalaron que el cráneo no tenía ningún resto tejido, por lo que no descartan que haya sido tratado con alguna sustancia química.
Ahora los investigadores de la Guardia Civil intentan determinar qué ocurrió con el resto del cuerpo.
María del Carmen se encuentra detenida y tiene antecedentes por dos estafas cometidas en 2013 y otra en 2017.
"Desde el primer momento supimos que había algo extraño en su desaparición, sospechamos que algo grave había pasado", dijo la prima del desaparecido, Begoña Arias.
“Siempre sospechamos que pasaba algo malo, él no se hubiese marchado nunca sin decir nada”, añadió.