La interna de ATE volvió a moverse con las paritarias de esta semana y ahora el sector de Raquel Blas, enfrentado a Roberto Macho, quiere impugnar la votación que aceptó la propuesta del gobierno para 2017.
El miércoles, las bases de la Salud aceptaron, en un plebiscito, un aumento salarial del 17% en dos tramos (10% en febrero y 7% en julio), además de otros ítems.
Al final del escrutinio hubo cánticos y agresiones verbales que reflejaron la interna. Incluso Blas y su hermana Gabriela, prosecretaria Gremial, cuestionaron el procedimiento.
La denuncia tomó un carácter formal con un texto presentado en la Subsecretaría de Trabajo con la firma de Jorge Chávez, secretario general adjunto, Gabriela Blas y el prosecretario administrativo Carlos Gómez.
Aseguran que “en la gran mayoría de los hospitales de la provincia se impuso el NO a la propuesta del Ejecutivo por amplia mayoría”.
También denuncian irregularidades como la apertura de urnas sin fiscalización, votos en sobres no firmados y planillas de votaciones nominales.
Aun con ellas, aseguran que el Sí no alcanzó el 60% de los votos emitidos, número que establecen como piso necesario para proceder a la firma de un acuerdo.